Aragón da un impulso esta semana a la campaña de vacunación y reservará una jornada, el próximo jueves, a la inmunización sin cita en todos los centros de salud. Será una de las iniciativas que se prevé poner en marcha estos días para acelerar el ritmo del proceso, que se ha ralentizado, y captar a los indecisos. Además, intensifica desde este lunes las terceras dosis en las residencias, con la intención de evitar que caduquen muchos de los viales que almacenan los centros de salud.

Sanidad estima que todavía hay unos 300.000 aragoneses sin vacunar, incluidos los menores de 12 años para los que no está autorizada, y la mitad serían susceptibles de recibir una dosis. El reto de llegar al 70% de la población al inicio de la campaña ya se superó y el de la Consejería es alcanzar ahora, al menos, el 85% de la población total con la pauta completa. Luis Gascón, jefe de servicio de Prevención y Promoción de la Salud, valoró que un objetivo realista sería captar a 75.000 personas, en su mayoría menores de 40 años. Y con ese propósito en mente se afronta esta semana: "Seguimos haciendo ese llamamiento a la responsabilidad y a la solidaridad, para protegerse a sí mismo y también a los demás".

La Consejería ha iniciado el envío masivo de sms a los mayores de 18 años registrados en la base de datos de usuarios que todavía no se han citado para la inoculación o no han completado las dos dosis, animándoles a que lo hagan. Y, para facilitar todavía más el proceso, el día 23 se ha planteado como un día de vacuna sin cita en todos los centros de salud de la Comunidad. Será de 14.00 a 15.00 en los ambulatorios de mañana y de 15.00 a 16.00, en los de tarde.

La Consejería, además, ha mantenido reuniones con los servicios de prevención de unas 15 grandes compañías aragonesas para preparar la logística necesaria para iniciar la vacunación en el entorno laboral. "Podríamos acordar también la inoculación en empresas de menor tamaño", dijo, cuya administración se realizaría a través de mutuas. Sanidad estudiará las coberturas de vacunación entre universitarios, por si fuera preciso habilitar algún punto específico en este ámbito o, incluso, en algún colegio donde se pudiera detectar un menor porcentaje de vacunación en secundaria o bachillerato.

Desde este lunes, los equipos de enfermería de los distintos centros de salud se desplazarán a las residencias de personas mayores para inocular las terceras dosis, con el objetivo de incrementar la inmunidad de este colectivo, el primero que recibió la inyección contra el coronavirus a partir de diciembre de 2020. En total, se llegará a 15.500 personas.

Emilia Nájera, que vive en la residencia pública Romareda de la capital, fue la primera persona vacunada en Aragón. Hoy volverá a ser de nuevo protagonista de este momento, junto a las consejeras de Sanidad y de Ciudadanía, Sira Repollés y María Victoria Broto. Desde el viernes, sin embargo, ya se han inoculados dosis adicionales en varios geriátricos de la Comunidad, para agilizar el proceso. También están administrando ya 9.000 terceras dosis a pacientes inmunodeprimidos.

Con estas estrategias, la DGA tratará de dar salida al amplio ‘stock’ que tiene, sobre todo teniendo en cuenta la caducidad de muchos lotes a finales de mes. Los últimos datos del Ministerio evidencian que Aragón ha recibido 2.113.445 vacunas contra la covid. De ellas, según el portal de Transparencia se han administrado 1.957.180. Hay en torno a 156.000 dosis pendientes de inocular. Un número suficientemente alto para continuar con la campaña sin recibir suministros regulares del Gobierno central, que dejará de distribuir semanalmente viales a Atención Primaria como venía haciendo y enviará bajo demanda.

Salud Pública ha identificado un objetivo claro en esta nueva fase de la campaña de vacunación: los menores de 40 años y, más en concreto, los jóvenes de entre 25 y 35. Y es, precisamente, esta franja de edad la que registra menores coberturas de inmunización. Hasta el momento, alrededor del 71% de los aragoneses de 20 a 39 años tienen ya la pauta completa.

Para Luis Gascón, coordinador de la vacunación contra la covid en la Comunidad, más que rechazo a este fármaco, entre los jóvenes se observa desinterés. "Debemos mejorar, y podemos hacerlo, convenciendo a esa población de la necesidad de vacunarse". Según reconoció, dadas las elevadas cifras que se han conseguido en Aragón resulta "cada vez más difícil" aumentar el porcentaje de cobertura, pero "con estrategias complementarias y variadas se puede ir subiendo esas tasas y al final sumaremos la cantidad suficiente para alcanzar la cifra deseada de inmunización".

Las opciones para mejorar las coberturas se centrarán, además de por segmentos de edad, por población de origen. La Consejería ha identificado "una menor vacunación en algunas personas extranjeras, especialmente las que proceden de Europa del Este, y también en la franja del Magreb y en el entorno subsahariano". De hecho, tal y como avanzó Gascón, jefe de servicio de Prevención y Promoción de la Salud, "la vacunación en esos países es muy escasa, y eso se refleja aquí". Las coberturas entre la población extranjera, en general, estarían por debajo del 60%. Y son todavía menores entre las personas de Europa del Este, donde no llegan al 50%: "Estamos planteando el trabajo con algunos mediadores o representantes de las distintas comunidades, que se añaden a las estrategias que se ponen en marcha, como el envío de sms animando a la inmunización o la vacunación en el ámbito laboral".