El diagnóstico precoz es una de las prioridades en la lucha contra el VIH (virus que causa el sida) en Aragón, donde se produjo un aumento del 12,6 % de personas diagnosticadas, pero un descenso de esta detección de casos en una etapa más tardía.

En un acto conmemorativo por el Día Mundial de la Lucha contra el sida en el parque Bruil de Zaragoza, donde el año pasado se instaló una placa de homenaje a los fallecidos como consecuencia de esta enfermedad, la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, ha destacado que el objetivo autonómico, en sintonía con el plan nacional, es trabajar con los objetivos 90-90-90 marcados por ONUSida para eliminar la epidemia dentro de 10 años.

Es decir, trabajar para que el 90 % de las personas que viven con el VIH conozcan su estado serológico, que el 90 % de ellos accedan al tratamiento y que el 90 % de los que toman medicación logren una represión viral efectiva.

En declaraciones antes de este mismo acto, y preguntado por el aumento de casos detectados en 2019 en la Comunidad, el director de Salud Pública aragonés, Francisco Javier Falo, ha explicado que el incremento en nuevos diagnósticos "no es una información necesariamente negativa".

"Uno de nuestros objetivos es aflorar los contagios que no están diagnosticados", ha señalado el director general, quien ha insistido en la importancia de actuar en un "estadio temprano" del desarrollo del virus, cuando la situación de respuesta inmunitaria es mejor.

En este sentido, ha expresado que es posible que la eficacia de las políticas de diagnóstico precoz vaya aparejada a un incremento de los casos diagnosticados, que serían aquellos que "antes no se detectaban".

En concreto, según los datos aportados por el Gobierno de Aragón, durante el año 2019 se notificaron en la Comunidad 131 nuevos diagnósticos de VIH, con una incidencia acumulada de 9,9 casos por 100.000 habitantes.

El 77,9 % fueron hombres (con incidencia más alta de varones en todos los grupos de edad), la media de edad al diagnóstico fue de 37,8 años y no se notificaron casos en menores de 15 años.

Durante el acto, dos miembros de la Asociación SOMOS LGTB+ de Aragón, en representación de todo el tejido asociativo, han evidenciado en su discurso que desde que comenzó la pandemia, factores como la dificultad al acceso a la Atención Primaria y a los especialistas en enfermedades infecciosas están limitando la prevención y el diagnóstico del VIH, así como la atención habitual a personas con esta patología.

"Esto va a suponer un incremento en las ya inaceptables tasas de diagnósticos tardíos cronificados en la Comunidad y puede tener un efecto negativo en el aumento de morbilidad de las personas con VIH", han alertado.

En el manifiesto, han recordado que cuarenta años después de que se detectaran los primeros casos, persiste "el estigma en la sociedad": "Demasiadas personas con esta patología han estado y siguen estando en una situación de autoconfinamiento social, viviendo su realidad desde el aislamiento, la soledad y la ocultación".

Por su parte, el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha manifestado que el aumento de casos en el informe de 2019 respalda el mensaje de que "no hay que bajar la guardia" y ha agradecido a las asociaciones que desde hace décadas trabajan en la capital aragonesa.

El consejero de Acción Social y Familia zaragozano, Ángel Lorén, ha añadido que la crisis sanitaria ha contribuido a la sensibilización sobre "qué significa una pandemia y lo vulnerables que somos" y ha llamado a la necesidad de concienciar, especialmente, a los más jóvenes.

Durante este acto de homenaje la actriz Encarni Corrales ha leído unos versos de La vida es sueño, de Calderón de la Barca, y ha interpretado una nana de Federico García Lorca en homenaje a los fallecidos como consecuencia de esta enfermedad.

Al concluir el acto, los representantes políticos y de las asociaciones han depositado un centro de flores en un lazo rojo, símbolo internacional de apoyo a la lucha contra el VIH-Sida.