Mostrarle al viajero la actividad cotidiana que se lleva a cabo en el mundo rural. Y hacerles partícipes de experiencias tan curiosas como trabajar la lana, hacer queso, pasear en burro, probar los huevos de las gallinas del Sobrarbe o disfrutar de rutas ecoturistas relacionadas con la interpretación de la naturaleza y el patrimonio fuera de los canales habituales de la provincia de Huesca y otros rincones de España. Este es el fundamento de Ecoagrotours (https://www.ecotur.es), una nueva iniciativa de ecoturismo que acaba de surgir en la provincia de Huesca, en Charo, un pequeño pueblo de la comarca de Sobrarbe de apenas 30 habitantes que quiere convertirse en un referente en turismo sostenible.

Unas iniciativas originales, que han sido ideadas por sus responsables en las largas semanas de confinamiento, pensando en aquellas personas que estos días han valorado, todavía más, si cabe todo lo natural y ecológico que nos rodea. "Nuestro objetivo es cubrir una necesidad que las agencias de viajes convencionales no cubren. Cada vez hay mas personas comprometidas con la filosofía de turismo sostenible y les queremos ofrecer paquetes de viajes en los que se combine la naturaleza, la agroalimentación, el mundo rural, la biodiversidad y el desarrollo sostenible. Aspectos muy necesarios para lograr un planeta mejor, como hemos podido ver estos meses a consecuencia de la covid-19», matiza Mireia Cabrero, responsable de esta iniciativa, que cuenta con el apoyo de Fundación Ecoagroturismo-Ecotur, que también es socio de la empresa.

Mireia es natural de Barcelona, pero lleva más de una década viviendo en este rincón del Pirineo aragonés, donde cuenta con una casa de turismo rural que le ha permitido darse cuenta de las necesidades y gustos de muchos viajeros que buscan algo diferente, en contacto con el medio rural.

Turismo responsable

Por eso, desde Ecoagrotours quieren "promover el ecoturismo entendido como una práctica turística ambientalmente responsable, que consiste en viajar a áreas naturales, protegidas o no, para disfrutar, apreciar y observar sus atractivos. Y propiciar también la participación activa de los ganaderos, agricultores y empresarios agroalimentarios, dando a conocer sus proyectos para que los viajeros conozcan de primera mano su día a día", indica Cabrero.

Por el momento, las actividades propuestas para desarrollar en la provincia de Huesca se centran más en rutas ecoturistas, con guías especializados en la interpretación del territorio. En breve comenzarán a incluir experiencias relacionadas con el sector primario, de ganaderos comprometidos con razas autóctonas o en peligro de extinción y que tengan actividades relacionadas con su actividad diaria. "Queremos que la gente que participe en estas experiencias conozca su realidad y aprenda a valorar su trabajo. Nuestro reto es que, de alguna manera, vuelvan a contactar con el mundo rural a través de sus protagonistas", explica. Y mientras esto ocurre, en las rutas de Ecoagrotours se apuesta por alojamientos donde se trabaja con el producto local, y así "promocionar de forma directa su trabajo", apunta.

A la web ya han llegado muchas consultas, y aunque el perfil de cliente no está muy definido, suelen ser personas con muchas inquietudes por lo ecológico, de procedencia muy variada (hay muchos extranjeros) y que "valoran el contacto con la naturaleza. Son viajeros que no quieren llegar a un sitio y recorrerlo rápidamente, sino que les gusta apreciar los detalles y valorarlos. En definitiva, impregnarse de este tipo de cultura rural y natural", concluye.