Donde es posible visitar a la vez las torres Eiffel y de Pisa

Desde las históricas muñecas o soldados de papel con prendas de quita y pon, pasando por monumentos de varios puntos del globo hasta llegar a naves espaciales o figuras realizadas en ‘papercraft’, una técnica similar al origami. Todas estas muestras de pasatiempos toman forma en las cerca de 800 piezas que componen la Exposición del Juguete Recortable Eustaquio Castellano ubicada en el Pabellón Cultural Carlos de Haes de Jaraba, y entre las que están aquellas montadas y las que todavía son solo láminas.

"Es un espacio en el que se recorre todo el proceso del recortable para disfrutar de su diseño en lámina y del arte de su composición, las diferentes técnicas de construcción de los juguetes recortables y los cambios a lo largo del siglo XX", explica José Antonio Berdié, director técnico de la muestra. Este proyecto, que se inauguró en mayo de 2017, se fraguó en el año 2016, en el marco del I Congreso de Educación en Democracia Activa que se desarrolló en Jaraba, al que acudió Eustaquio Castellano, impulsor junto a Rosa Maciá del Museo de Juguetes de Albarracín.

Para Castellano, empezar a darle forma a la idea "fue algo muy casual". "Los niños pedían tener una ludoteca, y nuestra fundación se ofreció para aportar el material y parte de nuestra colección de recortables. Nos acabó entusiasmando", reconoce. Para ponerlo en marcha, se mandaron cerca de 500 piezas, entre las que se encuentran muestras arquitectónicas del mundo, como la Torre Eiffel o la Torre de Pisa, pero también nacionales, como la barraca valenciana o la masía catalana. E incluso ejemplos aragoneses: "Nos han regalado una Basílica del Pilar de los años 30, con solo dos torres, y también estamos en proceso de realizar algunos edificios emblemáticos de la Expo 2008 para conmemorar su décimo aniversario", apunta José Antonio Berdié.

"El juguete recortable es uno de los más educativos", defiende Castellano, a la vez que enumera que entre las temáticas presentes están desde el ámbito científico, las formas geométricas o la anatomía. Así, la exposición además de varias vitrinas, cuenta con piezas colgadas y carteles explicativos. Con la buena acogida que ha tenido desde su apertura, en marzo de este año se acabó de materializar su ampliación, en la que se tomó el espacio del reubicado gimnasio para acoger otras 200 piezas.

Este proceso ha implicado, según Berdié, "unos cuantos meses de preparar planos para la distribución, cambiar mobiliario de sitio" y, sobre todo, tener claro los cuidados que necesitan los elementos que están expuestos. Con la ampliación del museo, Berdié indica que se ha ganado espacio para realizar talleres con colegios y grupos, y para una producción propia que "irá aumentando", cuenta con cierta ilusión.

Entre los que están por llegar se encuentran edificios emblemáticos de la propia localidad, que se unirán al ya presente peirón de Santa Águeda, y de municipios vecinos.