Molinos, donde las estalactitas crecen en filigrana

El principal atractivo turístico de Molinos está desde 1961 en estas majestuosas cuevas que atraen cada año a aficionados de todo el mundo, con sus formaciones atípicas y diversidad de tonalidades cromáticas.

Más imágenes de Molinos en 'Aragón, pueblo a pueblo'
Más imágenes de Molinos en 'Aragón, pueblo a pueblo'
Laura Uranga

Varias generaciones de españoles tienen un nosequé con las cuevas gracias a ‘Verano azul’ y Nerja. Aquellas formaciones gigantescas cautivaron –y asustaron un poco– a miles de chavales, amén de generalizar el gusto por la espeleología en el país. Las famosas cuevas del Drac en Mallorca son otro gran ejemplo de imán para los fans de las profundidades en secano; por Aragón hay unas cuantas, y quizá sea la de las Güixas de Villanúa la punta de lanza entre las que han sacado rédito turístico... además, naturalmente, de las Grutas de Cristal en Molinos.

El espectáculo de este enclave turolense, situado en el extremo noroccidental del Maestrazgo, es alucinante. Descubiertas en 1961, ofrecen dos grandes cámaras y un sinfín de recovecos a los ojos curiosos. Emilio Jordán es uno de los dos guías que las enseñan; natural del pueblo, lleva en esta función –que combina con las tareas de alguacil– toda su vida profesional. "Son casi treinta años en esta tarea, más de la mitad del tiempo que llevan abiertas al público, y más de media vida para mí. Cuando empecé acababa de salir del colegio, el alcalde me lo ofreció y aquí sigo, muy feliz; en los primeros años las enseñaba con linternas, cuando aún no tenían la instalación moderna actual. Es curioso, porque conozco cada centímetro, pero la belleza que me encuentro cada día me sigue asombrando esta maravilla".

Molinos: donde las estalactitas crecen en filigrana

Emilio explica que las Grutas de Cristal tienen un elemento diferenciador en relación a otras cuevas famosas de España. "Aquí hay dos salas principales, la de los Cristales y la Marina. En una de ellas tenemos las formaciones clásicas de estalactitas y estalagmitas, junto a otras figuras más inusuales; en la otra encontramos las llamadas estalactitas excéntricas, que bajan hacia el suelo haciendo verdaderas filigranas, hasta el punto de que parecen entretejerse, porque salen en varias direcciones. Hay muchas teorías sobra su formación: que si evaporación, corrientes de aire... hacen formas capilares, desafían la ley de la gravedad".

Imaginación al poder

Emilio recuerda a dos jueces que visitaron la instalación y quedaron maravillados: uno de la tierra, Juan Alberto Belloch (que las visitó junto a su esposa, la pianista Mari Cruz Soriano) y otro jiennense, Baltasar Garzón. "Me tocó a mí las dos veces enseñarlas, y se quedaron impresionados con todo, especialmente con las gotas de piedra que parecen corales. Es que si le echas imaginación, cada forma tiene algo, recuerda a algo. Eso por no hablar de los colores, desde el blanco del carbonato cálcico al rojo por el óxido de hierro, el azul que sale al oxidarse el cobre o el negro del lignito. Las formas abanderadas, por ejemplo, las hace el agua al bajar por los laterales: parecen túnicas. Yo no me canso de verlas; de hecho, cuando hago tareas de mantenimiento, siempre acabo descubriendo algo nuevo. ¿Murciélagos? Siempre tenemos alguno de guardia –bromea– aunque hoy parece que se ha tomado fiesta. Vaya, que hasta los tres magos de Oriente se pueden ver en un punto concreto sobre sus camellos. Hay un par de salas descubiertas aún sin habilitar, y no son el final de las grutas. De hecho, se cree que toda la montaña podría estar llena de cuevas. De las subvenciones dependerá que se investigue más o menos rápido".

La alcaldesa de Molinos, María Pilar Monfil, apunta que hasta el quincuagésimo aniversario del descubrimiento de las grutas no se conocían lo suficiente fuera del área. "Ese año se renovaron los accesos, se mejoró la instalación y desde entonces hemos recibido más visitas. Hicimos un reconocimiento a los hermanos Francisco y José Subils y Francisco Cardeña, espeleólogos de Barcelona que las descubrieron en 1961 en el paraje de las Graderas... y a los vecinos del pueblo que les ayudaron, por supuesto". En Semana Santa hay horario de visitas en mañana y tarde (11.00 a 13.00 y 16.00 a 18.00 y horario seguido de 10.00 a 19.00 los días 30, 31 y 1; en verano también hay aperturas diarias y el resto del año se conciertan las visitas en el Ayuntamiento. En el centro de Molinos está el complemento de la visita a las Grutas: el Museo de las Formaciones, alusivo a las citadas cuevas, que se aloja en el edificio del nuevo lavadero.

La ojinegra

No todo se basa en grutas cristalinas a la hora de definir a Molinos. El espectacular barranco de San Nicolás (en la entrada del pueblo) y la roca del Picuezo son otras dos formaciones naturales que llaman la atención. El pueblo maneja su día a día con los servicios básicos cubiertos; médico, farmacia, dos bares (uno de ellos, el Fontanal, también tiene habitaciones), dos tiendas y alojamiento rural en el Hostal de la Villa. En la actividad diaria, la ganadería tiene una fuerte incidencia, y es común ver a grandes rebaños ovinos pastando en los montes cercanos; la raza típica de la zona es la ojinegra.

En el Ayuntamiento tiene su sede administrativa la Asociación de Ganaderos de la Raza Ovina Ojinegra, que funciona como cooperativa y tiene 38 miembros: la mayoría son de Teruel y hay algunos de Valencia. La carne de la ojinegra es muy apreciada, y para velar por su integridad genealógica, esta asociación realiza una tarea de identificación y regulación. Fidel Falo, su secretario, lo explica. "Somos un árbol genealógico activo y, en la práctica, una oficina técnica. La Asociación se fundó en 1998; nuestra oveja es muy fácil de reconocer por los ojos, orejas, hocico, punta de las patas y cola, que son negras. El sector está en recesión, es evidente, pero tratamos de mantener los criterios de calidad siendo minuciosos en el cuidado de la raza".

Centro neurálgico de programas encaminados al desarrollo de toda el área

La Asociación para el Desarrollo del Maestrazgo (Adema) está formada por los 15 municipios que componen la comarca del Maestrazgo, y tiene su sede central en Molinos, con dos trabajadores fijos. Su actividad se centra en la búsqueda, gestión y puesta en marcha de programas e iniciativas comunitarias financiadas desde las distintas administraciones.

Desde su creación en 2002, se han desarrollado programas impulsados y financiados desde la Comisión Europea tan importantes como Leader Plus, Der Plus, Interreg III, Equal y Europe Direct. También está allí la sede del Centro Aragonés de Información Rural Europea (Caire), que mantiene un activo boletín informativo coordinado desde Molinos. Se han canalizado ayudas de la Diputación General de Aragón, con mención especial para el Parque Cultural del Maestrazgo, que reúne a un total de 43 municipios repartidos por seis comarcas turolenses.

LOS IMPRESCINDIBLES

Eleuterio Blasco

La sala de exposiciones Eleuterio Blasco Ferrer, junto al Ayuntamiento, recoge las obras que el escultor de Foz-Calanda cedió al municipio de Molinos con fines museísticos, piezas que se encuentran entre lo mejor de su trabajo.

Jorge Ortí

En la pared del bar Fontanal está la camiseta zaragocista de este joven delantero de 24 años que forma parte del Toledo tras haber integrado la primera plantilla del Real Zaragoza; tiene raíces familiares en Molinos.

Mandíbula prehistórica

Hace cuarenta años se encontró en las grutas una mandíbula humana a la que en principio se atribuyó una antigüedad de 25.000 años; análisis posteriores por radiocarbono dató el resto entre el 3090 y 3060 antes de Cristo.

Ir al especial 'Aragón, pueblo a pueblo'

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión