Reabren todas las carreteras del Pirineo salvo el Portalet

El paso fronterizo seguirá cerrado previsiblemente varios días más. Las estaciones ofrecen casi 290 kilómetros.

Las máquinas trabajan en una espectacular avalancha en el lado francés del Portalet, ayer.
Las máquinas trabajan en una espectacular avalancha en el lado francés del Portalet, ayer.
DGA

Tres de las cinco carreteras del Pirineo oscense que permanecían cerradas desde la excepcional nevada del miércoles se reabrieron este viernes al tráfico tras constatar los expertos un descenso del riesgo de aludes: el túnel de Bielsa (A-138) y los accesos a los complejos turísticos del balneario de Panticosa (A-2606) y los Llanos del Hospital de Benasque (A-139). Sin embargo, el paso fronterizo del Portal (A-136) se mantuvo cerrado porque este viernes volvieron a caer avalanchas importantes en la parte francesa. También sigue clausurada la entrada a Ordesa desde el puente de los Navarros (A-135).

Las previsiones para Portalet, además, no son optimistas y de hecho todo indica que continuará cerrado varios días más, quizá hasta principios de la semana que viene. Este viernes, las máquinas trabajaron en la vertiente francesa para intentar despejar la carretera de los aludes caídos el jueves, uno de ellos de más de 100 metros de longitud y 10 de altura. Sin embargo, las labores se vieron dificultadas porque la nieve también ha arrastrado rocas y árboles. De momento se mantiene el riesgo 4 sobre 5 de aludes y, además, los pronósticos anuncian lluvia y nieve para este fin de semana.

Más suerte tuvo el túnel de Bielsa-Aragnouet, que volvió a ponerse en servicio a las 17.00, adelantando la previsión inicial de apertura que se había fijado en principio para este sábado al mediodía. Y es que se redujo el peligro de avalanchas, después de que el jueves cayeran una decena de aludes a ambos lados, alguno de hasta 7 metros de altura.

280 personas estaban aisladas

Las máquinas también permitieron la reapertura a primera hora de las carreteras del balneario de Panticosa y Llanos del Hospital de Benasque, facilitando la movilidad de las 280 personas, entre clientes y trabajadores, que estaban aisladas en ambos establecimientos desde el miércoles.

En el resto de la red viaria de Huesca también hubo una decena de avisos por placas de hielo y cadenas y, además, dos desprendimientos en la A-138 (Abizanda) y en la A-1604 (Ceresola), que obligaron a cortar un carril.

De cara a este sábado, la Aemet ha activado un aviso por nevadas que podrían dejar 10 cm más en el Pirineo y que a primera hora podrían estar acompañadas por fuertes vientos de 80 km/h. También se mantiene la alerta por riesgo de aludes toda la jornada.

Estas precipitaciones permitirán aumentar todavía más los espesores de las estaciones de esquí, que con las nevadas de esta semana se han incrementado entre 20 y 40 centímetros respecto al parte de la pasada. En total, los aficionados al esquí dispondrán de una oferta de casi 290 kilómetros entre Formigal-Panticosa (122), Cerler (58), Astún (45), Candanchú (33) y Javalambre-Valdelinares (29).

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