¿Cómo superar con éxito una entrevista de trabajo?

Respira hondo, relaja tu mente y entra a la sala en la que tendrá lugar la reunión de trabajo. La empresa tiene tu currículum y tú estás allí para demostrar que eres una buena opción para ella. Y para eso lo mejor es que confíes en ti mismo, pero también que hayas preparado con cierto cuidado este encuentro. Una forma de hacerlo es reflexionando sobre los cuatro siguientes puntos, que Beatriz Hernández, responsable del departamento de Carreras Profesionales de Kühnel Escuela de Negocios, considera básicos para afrontar con éxito una entrevista de trabajo.

Conocer tu Curriculum Vitae

Si ante una pregunta, respondes con titubeos, dudas o pareces desubicado no estarás dando una buena imagen de tu trabajo. “Es vital conocer nuestro currículum exhaustivamente y así poder justificar los porqués, las fechas o los períodos sin trabajar, por ejemplo. Este tipo de preguntas son muy habituales en las entrevistas curriculares”, reflexiona Beatriz Hernández. 

No todo es un diseño bonito, saber argumentar por qué eres bueno en tu campo y cuál es tu experiencia sin la necesidad de tener delante tu currículum es fundamental para demostrar que te desenvuelves con soltura y que puedes actuar profesionalmente.

Llevar a cabo una reflexión personal

“Es preciso hacer una recapitulación mental de nuestra experiencia profesional antes de una entrevista de trabajo", prosigue Hernández.

¿Qué has aprendido? ¿Cuál es tu experiencia real? ¿Qué competencias has adquirido? ¿Cuáles podrías afrontar? ¿Cuáles son tus puntos fuertes? ¿Y los débiles? ¿Qué responderías a una pregunta sobre tus cualidades? ¿Y sobre tus defectos? ¿Cómo puedes aplicar tus conocimientos al nuevo puesto de trabajo? ¿Y a la empresa?

En definitiva: ¿qué aportas? Antes de presentarte a la entrevista es importante que reflexiones sobre este tipo de cuestiones. "De esta forma, podremos explicar qué hemos aprendido de cada puesto desempeñado y cómo podemos aplicar todos esos aprendizajes al puesto al que estamos optando”, argumenta la especialista en Carreras Profesionales.

Recuerda que tan importante es el qué se dice como el modo en el que se hace, por lo que el discurso debe ser claro, seguro y sincero.

Conocer la empresa

No asumas la entrevista como una cita a ciegas. De la misma forma que la empresa querrá conocerte para valorar si tienes un perfil adecuado, tú deberías infórmate sobre sus objetivos, su línea de trabajo, las responsabilidades que deberás asumir, la distancia, los valores... En definitiva: conocer a tu interlocutor. Gracias a Internet te resultará sencillo ahondar en este tipo de información.

Jugar con la actitud frente a la aptitud.

“Por supuesto, es básico estar formados y tener los conocimientos técnicos precisos para desarrollar un puesto de trabajo, pero todavía es más importante la actitud que demostramos ante los nuevos retos que nos puedan surgir en el desarrollo del mismo. Con una actitud positiva proyectas mejor imagen, además de que atraes cosas buenas. En cambio, con una actitud negativa, proyectamos una mala imagen de nosotros mismos”, comenta la profesional.

Si te preguntan sobre alguna competencia que todavía no has asumido, es preferible indicar que no tienes experiencia pero que estás interesado en aprender sobre ello. Mentir puede terminar generando una situación incómoda si posteriormente tienes que asumir encargos que se escapan a tu entendimiento y pueden dejarte en evidencia. Plantéate que de la misma forma que la empresa puede crecer contigo, tú puedes hacerlo con ella.

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