“Una web es eficiente si se puede manejar sin instrucciones y de forma intuitiva”

Daniel Torres, CEO & Founder de Torresburriel Estudio, es miembro del jurado de los premios Aragón en la Red y experto en usabilidad.

Daniel Torres, CEO & Founder de Torresburriel Estudio.
Daniel Torres, CEO & Founder de Torresburriel Estudio.

Daniel Torres es uno de los miembros del jurado de los premios Aragón en la Red, organizados por HERALDO DE ARAGÓN, que se entregan el próximo 19 de julio. Lleva veinte años como profesional en el sector de la tecnología y hoy por hoy es CEO & Founder de Torresburriel Estudio, empresa dedicada a analizar y profundizar en la experiencia de usuario para productos digitales y servicios, lo que en inglés y dentro del sector se conoce como UX.

¿Qué es esto de la experiencia de usuario (UX)?

A mí me gusta decir que trabajamos en la parte humana de los proyectos digitales porque nuestro objetivo es que las personas los entendamos y los sepamos manejar.

¿No es suficiente con diseñarlos aplicando el sentido común?

No, porque detrás existe toda una metodología que permite recoger la información y valorar cuáles son las necesidades de los usuarios para luego plasmarlas en el proyecto. Parece sencillo, pero creéme, no lo es.

¿Pero por qué no se diseñan webs más sencillas?

La tecnología ha sido un sector tradicionalmente dominado por gigantes empresariales y, además, no se trata de una disciplina absolutamente consolidada, yo diría que es inmadura. En los años ochenta, por ejemplo, la tecnología era solo cosa de informáticos. Es ahora, con su democratización, cuando es preciso avanzar para que todos estemos en igualdad de oportunidades.

Se habla mucho de ‘usabilidad’ de los portales, pero este concepto no existe en la RAE…

No, es verdad. Solo existe el término en inglés: ‘usability’, pero alude al mismo concepto de la experiencia de usuario.

¿Es más importante el usuario que el diseño?

Por supuesto, el diseño está centrado en el usuario y ha cambiado el criterio, ya no se buscan webs bonitas sino eficientes, que generen tráfico y rentabilidad económica.

¿Es posible que vuelva a cambiar el criterio dentro de unos años?

Por supuesto. Hace cinco años era impensable que pudiera contestarte a esta entrevista a través de un reloj, por tanto sí que creo que las webs cambiarán mucho en los próximos años, pero, eso sí, seguirán siendo ‘usables’.

¿Cómo sabemos si una web es usable o no, eficiente o no?

Igual que sabemos si una lavadora es útil o no, es decir, si lo trasladamos al ámbito cotidiano es todo aquello que podemos manejar sin instrucciones y de forma intuitiva.

Por cierto, ya se sabe quiénes son los finalistas de la cuarta edición de los premios Aragón en la Red. Como miembro del jurado, ¿cómo valoraría las candidaturas presentadas?

Me he llevado muy buena impresión con todos los proyectos, sobre todo al comprobar que los negocios tradicionales, de toda la vida, se están dando cuenta de que necesitan tener presencia digital, y están dando ese paso de un modo más que digno.

Otra de las grandes noticias es que muchos de los proyectos proceden del ámbito rural, lo que confirma que cualquier empresa del pueblo de al lado puede competir con una de Nueva York. No hay que olvidar que la tecnología vertebra el territorio.

En su opinión, ¿cree que es importante la aportación del certamen al sector?

Por supuesto, los premios Aragón en la Red son un escaparate, además de una referencia, muy necesario para dar a conocer esta industria. Incluso los que trabajamos en ella tenemos una visión parcial y hace falta un elemento aglutinador para verlo todo en conjunto y ofrecer una visibilidad global.