Los hospitales volverán a estar al ralentí este verano. La reducción de la actividad quirúrgica y las vacaciones del personal sanitario dejarán de nuevo los centros sanitarios a medio gas, sobre todo en agosto, cuando está previsto que lleguen a cerrarse más de medio millar de camas. Solo entre el Miguel Servet y el Clínico se bloquearán en el tramo central del periodo estival 453 plazas. Una proporción muy similar a la de 2013 (más de 550), ya que durante 2014 y 2015 el anterior Ejecutivo autonómico mantuvo abiertas más habitaciones por el plan de choque que puso en marcha para intentar reducir la lista de espera quirúrgica.

El Hospital Miguel Servet de Zaragoza, el de mayor capacidad con más de 1.200 camas disponibles, será de nuevo el centro que más habitaciones cerrará durante los próximos meses, aunque será a partir de julio cuando se note realmente el descenso de plazas disponibles. A partir de la segunda quincena del mes que viene, se anularán 135 y durante agosto, 215 (en el año 2013 se llegó a las 243).

En concreto, es el bloque de Traumatología el que más reducirá la actividad quirúrgica en verano y el que tendrá inoperativas más plazas: hasta 85. Mientras que la segunda y tercera planta de Quemados (con capacidad para 34 pacientes y 17, respectivamente) permanecerán clausuradas durante todo el verano.

En el Clínico, desde el 1 al 15 de julio habrá 70 camas menos, 155 durante la segunda quincena y 187 en agosto (en 2015, se cerraron este último mes 203). Las primeras dos semanas de septiembre también se espera poca actividad y se ha previsto dejar inoperativas 177 camas durante la primera quincena y 62, hasta final de mes.

Según datos facilitados por CSI-F y CC. OO. y confirmados después por Sanidad, el San Jorge de Huesca también adecuará sus recursos a la actividad sanitaria. Durante el mes de julio, cerrará parcialmente la quinta planta y del 29 de julio hasta el 15 de septiembre, toda ella (normalmente, tiene capacidad para 52 personas). La gerencia de este centro también contempla que la unidad de cuidados intensivos quede con una dotación solo de 7 camas del 16 de julio al 15 de septiembre.

En Teruel, aunque las fechas están sin concretar, la previsión es que cierre una de las dos plantas del Hospital San José (cada una de estas tiene 25 camas) y 15 plazas de Traumatología del Obispo Polanco.Pendientes de la demanda

A pesar de esta previsión de cierre de camas, las direcciones de los hospitales han hecho hincapié en que "ante cualquier incremento de las necesidades, se tomarán las medidas oportunas para garantizar la asistencia y cuidado de los pacientes". De hecho, por ejemplo, inicialmente estaba previsto que la sala 3 de observación de Urgencias del Miguel Servet se cerrara en estas dos primeras semanas de junio, pero de momento se mantiene en activo ante los últimos picos asistenciales (unidos a la falta de camas para ingresar) que han saturado Urgencias durante los últimos días.

Fuentes del Departamento de Sanidad explicaron que ante el descenso de la actividad quirúrgica durante el periodo estival, cada hospital se ha planificado para intentar potenciar la cirugía ambulatoria. Algunos procesos quirúrgicos permiten que el enfermo no precise ser ingresado y pueda irse a su casa a las pocas horas de ser operado.