Como unos invitados que han venido a tu casa unos días y luego se vuelven a la suya", compara el repliegue de las maniobras de la OTAN el coronel Miguel Benítez, del Ejército del Aire. "En la Base quedan unos 250 militares que están recogiendo las tiendas y son los que las instalaron (los logistas de Alemania y Estados Unidos). Pero la plataforma está vacía y todos los aviones han regresado", agrega. Las únicas aeronaves que han quedado en la Base son el helicóptero Mi17, accidentado en el campo de San Gregorio con 16 heridos leves, y un cazabombardero Alca (los dos son checos) que sufrió el choque contra un buitre en el polígono de tiro de Bardenas. El helicóptero fue trasladado el martes pasado en una góndola a la Base y se metió en un hangar custodiado por orden del juez togado militar que abrió la investigación. Es posible que las Fuerzas Aéreas de la República Checa se lo lleven desde Zaragoza la próxima semana.

Aunque parece que el ejercicio ha terminado, entre San Gregorio y la Base aérea quedan todavía unos mil militares, de los 12.000 que estuvieron desplegados en la capital aragonesa durante la fase real (livex) del ejercicio Trident Juncture. De los que quedan para completar el repliegue, casi 250 españoles pertenecen a unidades como la Brigada Logística (Brilog), según el teniente coronel Jesús Leal.

Esta unidad se encargó del gran operativo logístico tanto de la llegada como el regreso de todos los efectivos. "Para todos no han acabado todavía las maniobras", señaló el portavoz de la Brilog, que cierran el despliegue el día 20. Además de españoles, queda todavía personal procedente de once naciones.

Cada día se pueden ver columnas de vehículos o convoyes con camiones que transportan vehículos acorazados. Una vez cargados se aparcan en el centro de distribución de convoyes, utilizado para no colapsar carreteras ni accesos al campo de maniobras. De allí salen hacia el puerto de Bilbao o Valencia. Hoy está previsto que se realicen 30 misiones, que movilizan a 750 militares, 200 vehículos y una treintena de contenedores que transportan.Cesión al Banco de alimentos

Pero las maniobras han acabado para las unidades norteamericanas con un regalo, como una costumbre en su país. Tuvieron un detalle el pasado jueves cuando entregaron 9.000 kilos de comida al Banco de Alimentos de Zaragoza a través de los militares de las Agrupaciones de Apoyo Logístico 21 (Sevilla) y 41 (Zaragoza). Los víveres que han donado son raciones de campaña, leche, batidos de chocolate, café, zumos, azúcar, tartas, condimentos alimenticios, carne, mantequilla, varios tipos de salsas, bollería, sopas y ensaladas.

El presidente del Banco de Alimentos de Zaragoza, José Ignacio Alfaro, agradeció la oportunidad de la donación y destacó la cantidad de platos preparados (casi 5.000 kilos) y leche (más de 1.200 litros). Recordó que fueron entregados de las unidades norteamericanas desplegadas en el campo de maniobras de San Gregorio y que militares de la Brigada Logística trasladaron al almacén de esta institución sin ánimo de lucro.