En pleno asalto artístico al tranvía

Algunos viandantes se han adueñado de los cubos en las estaciones de Juslibol, Argualas y Los Pájaros de la mano de los personajes de la dibujante zaragozana Erica Fustero, que retrata lo cotidiano con humor, como ese hombre que apenas puede andar abrazado a un gigantesco oso de peluche.

Son algunas de las intervenciones de la décima edición del Festival Internacional Asalto que ya se disfrutan en este transporte urbano. Dejan claro las buenas migas que pueden hacer los vagones y el grafiti.

Diez artistas locales, nacionales e internacionales de dispares estilos y planteamientos creativos, se encargan desde el pasado lunes de pintar los cubos de luz de todas las paradas de la línea. En total 46 lienzos de luz ‘tuneados’ y una exposición líneal única en España de 12,8 kilómetros (es la primera experiencia de este tipo que se pone en marcha en una línea de tranvía en nuestro país).

Un recorrido por el trayecto permitía comprobar ayer que casi una tercera parte de las acciones están ya finalizadas o en marcha. Queda por delante el fin de semana. El espectáculo adquiere otra dimensión por la noche. Las obras adquieren visibilidad y potencia al iluminarse los prismas por dentro.

A últimas horas de la mañana daban vida a su hombre árbol en la plaza de San Francisco. Sus personajes parecen sacados de ‘Alicia en el país de los maravillas’ o de una película de Tim Burton, aunque ellos hablan de surrealismo pop.

¿Por qué utilizan sobre todo el rotulador negro? Es una de las preguntas que más se hace la gente. Es el color que mejor funciona, sobre todo cuando se iluminan los prismas. No faltan pequeños toques de color. Como los que da la ilustradora zaragozana Arantxa Recio (de nombre artístico Harsa). Ayer al mediodía, en la parada Un americano en París, estaba inmersa en un lobo con detalles en naranja para su obra ‘Verle los ojos al lobo’.

"Me inspiro en cada zona e imagino la historia a contar. En este caso también escribo micropoemas", comentaba. Pinceladas de color se ven también en las imágenes de la zaragozana Erica Fustero y las extrañas figuras esquemáticas del holandés Daan Botlek.

En la marquesina de César Augusto Susana Ortiz invitaba a su hija Victoria, de 5 años, a fotografiarse junto a un grafiti y a prestar atención en el viaje a "este arte contemporáneo". "Es una idea bonita, que llama la atención y que podría prolongarse en el tiempo", opinaba Ana Candale. De momento, las intervenciones se quieren mantener hasta las fiestas del Pilar.

Con el fin de que los usuarios sean también parte de este proyecto cultural, Tranvías de Zaragoza pone en marcha a partir del lunes el reto #paradaASALTO. A través de la aplicación de móvil Hunteet se pueden enviar fotografías y participar en un concurso (más información en www.hunteet.com).

El Asalto de 2015 inauguró ayer otra de sus ‘estaciones’ ineludibles. Se trata de la primera planta del Centro de Historias, que acoge hasta el 15 de noviembre la exposición conmemorativa de los 10 años de trayectoria del certamen. Hay obras de 108, Boa Mistura, Roberto Ciredz, Botlek, Danjer, Dier, iNo, Harsa, Isaac Mahow, OKO, Sabek, Malakkai, Reskate, Wesr, Smithe, Seher y Ufocinque.