Tres detenidos por asaltos violentos en un estanco y una céntrica heladería
Los atracadores, uno de ellos de solo 15 años, dieron los golpes armados con una pistola y un cuchillo de 36 centímetros.
Según fuentes de la Jefatura Superior de Aragón, el primer atraco se produjo el pasado martes, día 11 de agosto, en un estanco ubicado en la calle de Vista Alegre, en el entorno del parque Pignatelli de Zaragoza. Sobre las 19,30, un adolescente accedió al establecimiento armado con una pistola y exigió al dependiente que le hiciera entrega de la recaudación. Para evitar que el menor se pusiera nervioso, esta persona no dudó en darle los 350 euros que tenía en el cajón.
El joven asaltante se dio rápidamente a la fuga, pero las pesquisas del Grupo de Menores de la Jefatura Superior (Grume) permitieron identificarle y proceder a su localización. Tras interrogarle por estos hechos en presencia de sus padres, quedó a disposición de la Fiscalía. El segundo atraco tuvo lugar en una conocida heladería del Coso zaragozano en la medianoche del miércoles. En este caso, los autores fueron una pareja formada por un varón de 44 años, identificado como Andrés Javier M. C., y una mujer de 37, de nombre María Yolanda M. P., ambos con antecedentes por delitos contra la propiedad.
Para conseguir hacerse con unos 300 euros de la recaudación, los asaltantes intimidaron a la dependienta con un cuchillo de grandes dimensiones. Conseguido su objetivo, la pareja salió corriendo del local, pero un viandante se percató de lo sucedido y avisó enseguida a la centralita del 091. Cuando llegaron las patrullas, esta misma persona facilitó a los agentes la descripción de los ladrones, así como el recorrido que habían utilizado en su huida. Gracias a la colaboración de este testigo, la Policía logró dar finalmente con los autores de este robo con intimidación en las inmediaciones de la heladería. Los funcionarios consiguieron recuperar también el arma utilizada en el asalto, que había sido arrojada en una papelera de la zona.
Al proceder al registro del coche en el que circulaban, en un punto de la autopista muy próximo a la capital, uno de los funcionarios descubrió el arma guardada dentro de una bufanda tubular. Además de la pistola, que figuraba como sustraída en Tarragona en el año 2000, se intervino un cargador con 13 cartuchos.