Hacienda desconvoca el Consejo Fiscal tras la queja de varias autonomías del PSOE
Su dirección federal exigió a Montoro retrasar la aprobación de los límites de déficit hasta que formen sus gobiernos.
Pese al posicionamiento de Aragón y de comunidades como Baleares (su presidente toma posesión hoy del cargo y y aún no ha formado gobierno), que habían anunciado que no iban a enviar a ningún representante, el Gobierno central intentó inicialmente no cambiar sus planes. El responsable de la Oficina Económica del Presidente, Álvaro Nadal, lo rechazó por la mañana, argumentando que no había margen legal para posponer la votación.
Sin embargo, ante la posición clara del PSOE, el Ministerio de Hacienda decidió dar marcha atrás a media mañana. Además de la crítica socialista, se constató que podría darse el caso de que votasen menos de la mitad de los consejeros autonómicos. Ahora, todo indica que esa misma reunión se celebrará la próxima semana, ya con una mayoría de consejeros socialistas.
La reunión debe celebrarse a lo largo de este mes, ya que en ella las autonomías tienen que validar también el techo de gasto estatal. Sin ese acuerdo, el Gobierno central no puede presentar sus presupuestos y las autonomías tampoco pueden elaborar los suyos. El encuentro estaba convocado después de que Hacienda diese a conocer el déficit de las autonomías hasta abril. En el caso de Aragón, la DGA ya había generado 142 millones, más de la mitad del déficit que tiene legalmente permitido para todo el año.
Tras conocer la decisión de Montoro, Pilar Alegría, secretaria de Organización de los socialistas aragoneses, consideró "bastante normal" la desconvocatoria. En su opinión, el Ministerio "tiene que ser respetuoso" con el proceso de conformación de los gobiernos autonómicos y "retrasar" la reunión para que "quienes se sienten sean los nuevos consejeros" de Hacienda.
Maru Díaz, portavoz de Podemos en las Cortes, criticó la gestión del PP-PAR, "que se ha vendido en términos de eficacia económica y que ha supuesto recortes que no han servido para reducir el déficit y además han mermado el gasto social". También censuró la "opacidad" en el gasto.
Por su parte, el presidente del PAR y portavoz en las Cortes, Arturo Aliaga, exigió "justicia financiera para Aragón" y urgió un nuevo modelo de financiación que evite "nuevos agravios". "Cuantos más recursos tengamos mayor será la calidad de vida de los aragoneses", añadió.
Por su parte, la portavoz de Ciudadanos, Susana Gaspar, recordó que "ya con el dato de enero estaba claro" el importante desajuste. Valoró que el margen del nuevo Ejecutivo hasta fin de año "va a ser muy limitado". A juicio de Gaspar, Javier Lambán "se va a encontrar con unas cuentas mermadas y tendrá que decidir de dónde obtiene recursos y qué partidas modifica para poner en marcha las políticas que quiere hacer".
Tampoco para CHA es una sorpresa el dato del déficit acumulado hasta abril. Su presidente y portavoz en las Cortes, José Luis Soro, lo llegó a calificar como "la crónica de una muerte anunciada" y expresó su preocupación "por las consecuencias y la utilización política que pueda hacer Montoro". Asimismo mostró su inquietud por el hecho de que el nuevo Gobierno de Aragón "tenga las manos totalmente atadas para desarrollar políticas sociales por la gestión nefasta que ha hecho Rudi".
Patricia Luquin, de IU, coincidió en que lo ocurrido era "previsible" y en que las últimas cifras conocidas "constatan el fracaso de las políticas de ajuste puro y duro, que no han servido ni para cumplir el objetivo". Y avisó de que cuando tome posesión el nuevo Gobierno "habrá que abrir el debate sobre si pasa algo por incumplir el déficit".
