Dos de cada tres municipios aragoneses perdieron población a lo largo del año pasado
La marcha de inmigrantes y de jóvenes en busca de oportunidades agrava este problema.
La sangría demográfica continúa. Aragón no dejó de perder habitantes a lo largo del ejercicio pasado y arrancó el presente año con 21.765 vecinos menos que el anterior, según se desprende de los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadístca, que cifra en 1.325.385 el número de personas que actualmente viven en la Comunidad.
La crisis se agrava al bajar la vista a las organizaciones territoriales de menor tamaño, los municipios. Aragón tiene 731 municipios y en 495 de ellos, dos de cada tres, descendió el número de empadronados, una problemática relacionada con la marcha paulatina de vecinos extranjeros. "Los inmigrantes han maquillado durante los últimos años la situación demográfica de Aragón, una región muy afectada por la despoblación y el envejecimiento de sus habitantes. Ahora, la situación es preocupante", explicaba Ángel Pueyo, experto en Geografía Humana y profesor de la Universidad de Zaragoza.
A este factor se suma la fuga de cerebros y de mano de obra joven, un fenómeno imparable desde los primeros compases de la crisis. "Se está marchando la gente más preparada, la que podría impulsar el cambio de modelo que necesitamos, ahonda.
A lo largo del año pasado, 198 localidades aragonesas vieron crecer el número de personas que vivían de manera habitual en ellas, mientras que otras 38 mantuvieron la cifra del curso anterior. Entre los municipios que incrementaron su padrón destaca Cuarte de Huerva, que siguió en la línea alcista de la última década logrando pasar de 10.043 a 11.589 residentes en solo un año.
En términos absolutos, Zaragoza es la provincia que más habitantes ha perdido (18.527). Le sigue la provincia de Teruel (1.818), mientras que en la de Huesca se redujo en 1.420 empadronados. La Comunidad aragonesa cuenta con 618 municipios con menos de un millar de habitantes; cien por debajo de los 10.000; once por debajo de 50.000, Huesca, que apenas supera los 50.000 y Zaragoza, con más de medio millón de habitantes.
El sociólogo Carlos Gómez Bahillo, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Zaragoza, recuerda que gran parte de las poblaciones que pierden músculo "están muertas desde hace décadas". "No hay que mirar solo el número de vecinos o el descenso de población que han tenido en los últimos años -comenta-. Un indicador muy claro es el número de mujeres fértiles que residen en ellos, y en muchos pueblos de Aragón ya hace mucho que no hay relevo generacional".
Singularidades contra la despoblación
Festivales de música, sacar a relucir el patrimonio, recreaciones medievales, parques temáticos... la lucha contra la despoblación de los pueblos de la provincia de Teruel pasa por identificar la singularidad de cada núcleo poblacional y promover su desarrollo. Esa es la idea clave del programa europeo Philoxenia Plus, una iniciativa del Bajo Aragón con la que se pretende combatir la marcha de residentes.
"El objetivo es asociar un pueblo, un producto, identificando la singularidad que permita ser un acicate para el mantenimiento y atracción de nuevos pobladores", explica el diputado delegado de Desarrollo Territorial, Julio Esteban.
