Justicia

El CGPJ respetará las circunstancias de Aragón para modificar la planta judicial

La propuesta de reforma prevé que los seis juzgados de Huesca queden en tres; los siete de Zaragoza en dos y los tres de Teruel en uno, además de uno interprovincial que uniría el de Alcañiz y el de Caspe.

El Consejo General del Poder Judicial está dispuesto a respetar las especiales circunstancias de Aragón en el proceso, "que será largo en el tiempo", de modificar la ley de Demarcación y Planta Judicial, después de que el propio CGPJ anunciara que en esta región la demarcaciones judiciales iban a pasar de 17 a 7. 


Este miércoles han comenzado en las Cortes de Aragón las sesiones de la comisión especial de estudio creada para analizar la propuesta que sería más adecuada para la comunidad cuando se reforme la citada ley, sobre la que el CGPJ ha elaborado un informe, que está en estudio, y que prevé que los seis juzgados de Huesca queden en tres; los siete de Zaragoza en dos y los tres de Teruel en uno, además de uno interprovincial que uniría el de Alcañiz y el de Caspe.


En la comisión han comparecido Félix Azón y Antonio Montserrat, vocales del Consejo General del Poder Judicial, quienes han detallado que esta se trata solo de una "propuesta de trabajo", de un "documento interno" para que los jueces opinen y del que saldrá la configuración definitiva del nuevo mapa judicial.


Se trata de uno de los requisitos indispensables para llevar a cabo el plan de modernización de la justicia, pero que no tendrá sentido, ha dicho Azón, si no se combina con otras medidas, como la extensión del uso de las nuevas tecnologías, la implantación de la modificación de la Oficina Judicial, la reforma de la ley de enjuiciamiento criminal o la generalización de los Tribunales de Distancia.


Ha agregado que, en fijación del nuevo mapa judicial es necesario, además de tener en cuenta las especiales circunstancias de cada comunidad, ser "imaginativos" y "romper con lo que hay hasta ahora" -cuya división data de 1834-, puesto que si la organización no cambia, "el sistema está abocado al colapso en diez o quince años".


Además, ha recordado que el Estatuto de Autonomía de Aragón, en su artículo 68, fija que es competencia de la comunidad determinar los límites de las demarcaciones territoriales de los órganos jurisdiccionales y la capitalidad de estas.


El CGPJ pretende, ha indicado Azón, mejorar el servicio público de la justicia, para lo que es "intrascendente" que haya muchos o pocos juzgados, y garantizar la igualdad real en el acceso de la ciudadanía a la administración de justicia, algo especialmente complicado en Aragón por sus especiales condiciones geográficas y sociales.


Para ello, este órgano apuesta por la especialización de los jueces, como que haya más magistrados que entiendan solo de un asunto (familia, mercantil, violencia de género) y la colegiación, es decir, unir grupos de jueces en una misma partida judicial.


Azón ha reconocido que estos principios son "muy difíciles" de aplicar en Aragón, tal y como ha puesto de manifiesto en un informe la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA), a pesar de lo cual se ha mostrado convencido de la necesidad de "avanzar" en la modificación del mapa judicial.


Además, ha dicho que "sería bueno, en la medida de las posibilidades", que todos los juzgados cuenten con los mismos servicios adicionales.


Montserrat, por su parte, ha coincidido en que la situación actual de la justicia es "absolutamente inasumible" y que la estructura judicial ha llegado a un punto en el que "no se puede aguantar más".


El papel del CGPJ en este sentido, ha apuntado, es "fijar los criterios" de esta nueva organización, y así luego la "concreción" en cuanto a demarcaciones y sedes, que corresponde también al gobierno de Aragón, será "más fácil".