Vecinos de Miralsot logran parar la obra del gasoducto

Un centenar de habitantes del barrio fragatino de Miralsot han conseguido paralizar las obras del gasoducto Velilla-Fraga a su paso por este núcleo tras llevar a cabo el pasado lunes un acto de protesta, encabezados por el presidente de la Asociación de Vecinos, Justo Visa.

La movilización tuvo lugar a las 08.00 en el antiguo campo de fútbol, adonde están llegando los trabajos, ejecutados por la empresa Endesa Gas Transportista, y que según los vecinos impedirían una posible expansión futura del barrio. Por ello exigen que la tubería se aleje unos 100 metros del trazado previsto, pasando por un monte propiedad del Gobierno de Aragón. Finalmente, decidieron manifestarse en el sitio donde debían acometerse las obras con la intención de impedir su avance.

Ante estas peticiones, responsables de empresa, el alcalde de Fraga, José Luis Moret, y los vecinos mantuvieron una reunión de urgencia en la que se acordó modificar el trazado. No obstante, los trabajos de construcción de la infraestructura continúan en otros tramos.

Cabe recordar que el trazado de esta gasoducto, cuyas obras se iniciaron el pasado mes de febrero, ya sufrió una primera modificación sobre el inicialmente previsto, para evitar afecciones en zonas de cultivo y hacerlo pasar por eriales, monte y otros bienes y servicios de dominio público. El segundo trazado que se está ejecutando ahora mismo superó la fase de información pública en mayo del año 2006 sin que se presentaran alegaciones, puesto que según explican los vecinos de Miralsot, pensaban que pasaba más lejos del núcleo. De ahí, su sorpresa ahora al ver las excavaciones.

El gasoducto tiene diez kilómetros de longitud, tres dentro del municipio de Velilla y siete en Fraga. A partir de este verano, dará servicio a la capital bajocinqueña y en un futuro al polígono Fondo de Litera. Más adelante, podría prolongarse hasta Mequinenza y su área industrial.