El Zaragoza acumula experiencia y el Juventud comienza su sprint final

En las trece jornadas que restan para acabar la competición los de Javier Garcés esperan seguir con las directrices marcadas por el club mientras que los de Toño Blasco deben salvar los siete puntos que le separan para la salvación.

A la espera que se reanude el fin de semana del 7-8 de enero la División de Honor Juvenil, y lo haga con el segundo de los derbis entre el Santo Domingo Juventud y el Real Zaragoza, que se disputará en el Joaquín González, toca hacer balance de lo ya acontecido y sobre todo de las trece jornadas que quedan por delante hasta finalizar la competición.

En séptima posición de la tabla aparece clasificado el Real Zaragoza de Javier Garcés. Una temporada más, apuesta clara y sin tapujos por la juventud, con muchos jugadores que están en su primer o segundo año juvenil. Experiencia que debe ser muy positiva en un futuro no muy lejano a la hora que los jugadores intenten alcanzar el poder llegar al primer equipo de la entidad blanquilla, como es el competir cada fin de semana ante la flor y nata de las canteras españolas.

Casi que viene de la mano el hecho que esta momentánea inexperiencia haya hecho perder algún punto por el camino, especialmente en algunos de los encuentros disputados en la Ciudad Deportiva, donde también hay que poner en primera plana el haber tuteado a todo un FC Barcelona o el Mallorca.

También está costando ganar fuera de casa, donde hasta el momento solo se ha podido conseguir en Sabadell en la última fecha disputada. En cualquier caso, y como se repite por activa y por pasiva desde el club, el interés clasificatorio final ocupa un segundo plano en estos momentos.

Una carrera al sprint es lo que le espera de aquí en adelante al Santo Domingo Juventud. Siete puntos son los que separan a los de Toño Blasco del Ferriolense, primer equipo que ahora mismo se salvaría. De nuevo este salvaje y complicadísimo grupo III está dispuesto a engullirse a un representante aragonés, pero lo que es seguro es que los naranjas no va a dejarse comer tan fácilmente.

Queda tiempo por delante, y datos que invitan al optimismo, y es que algunos de los rivales directos todavía tienen que rendir visita por las instalaciones de Torre Ramona. Por casa tienen que pasar obligatoriamente las opciones de permanencia. Ahora si que si no se pueden dejar volar más puntos de los que ya se han ido, y seguir e incluso mejorar si se puede las prestaciones a domicilio, que no están siendo del todo malas.

Aunque las cuentas de la lechera pocas veces suelen funcionar, parece que será necesario acercarse a lograr aproximadamente una veintena de puntos en las jornadas restantes para llegar con opciones al final. Difícil si, pero ni mucho menos imposible.