Zaragoza respira Navidad

Cientos de personas se han acercado este sábado a visitar el belén y el mercadillo navideño.

El tobogán de trineos, una de las atracciones favoritas
Zaragoza respira Navidad
Toni Galán. A Photo Agency

La plaza del Pilar es, durante estos días, un espacio de magia, felicidad y buenos deseos. Más de 4.000 personas, según fuentes de la organización, han pasado esta mañana de sábado por el Mercado Navideño y se espera que muchas más lo visiten por la tarde.


Y no es para menos, porque en el epicentro de la ciudad se alberga uno de los mayores belenes de España a tamaño real, una pista de hielo, un tobogán de trineos y un mercado navideño presidido por un gran árbol de los deseos. Todo un espectáculo de magia, que ni pequeños ni mayores han querido perderse.El espíritu navideño zaragozano atrae a visitantes de todos los lugares


Visitantes de todos los puntos de la Comunidad y de fuera de ella se han acercado este puente hasta Zaragoza. Un ejemplo de ello son Agustín, Raquel y su hija pequeña Aurora. Esta familia ha venido desde Logroño atraída por el espíritu navideño zaragozano y por ahora aseguran que están más que encantados. "Hay mucha animación en la plaza, por ahora Zaragoza nos está gustando mucho", comenta Raquel. Desde Castellón ha venido Irene con su familia. El año pasado vinieron por primera vez y les gustó tanto que han querido repetir.


El belén es uno de los puntos fuertes del espectáculo navideño.La muestra de 1.500 metros cuadrados no deja indiferente a nadie. Todos salen encantados tras contemplar y fotografiarse con las figuras a tamaño real. Es el caso de María de 32 años y Jesús de 36. "Pero no somos los del portal eh", bromean. Han aprovechado el puente para visitar por primera vez la ciudad. "Venimos desde Ciudad Real y esto nos está encantando. La expresividad de las figuras y todo el recorrido está muy conseguido", explican."Deseo: paz en el mundo y un rayo láser"


Justo enfrente otro de los elementos que más pasiones despierta. El árbol de los deseos recibió el año pasado un total de 25.000 anhelos llegados de todos los puntos. "Trabajo y salud predominaron en 2013, pero este año la gente está pidiendo más felicidad. La gente tiene ganas de empezar a sonreír", explica Fran Muñoz del equipo de organización de la muestra. Otros pedían paz en el mundo y algunos confundían el árbol con la carta de los Reyes Magos. "Deseo un rayo láser", escribía uno de los pequeños. En torno al árbol decenas de puestos de alimentación y complementos ponen el toque cálido a una jornada de lo más fría.


Decenas de personas esperaban en los puestos aunque el más demandado era el de churros. En el resto, el frío parecía apagar los ánimos consumistas. "Este año la venta está siendo un poco más floja que otros años pero se irá animando", explica Paola del puesto de artesanía de calzado Pafardar. En estos puestos, habituales ya de las fechas más señaladas, se pueden encontrar desde embutidos a figuras para el belén.


Pero sin duda las atracciones estrella de la plaza del Pilar es la pista de hielo y el tobogán para trineos. Alejandro de 8 años estaría todo el día venga a subir y bajar. "Les encanta lo del trineo, es una gran idea para los pequeños", explica Anun, su madre. Los paseos en burro también tienen su público y por ello hay pocos momentos en los que no hay fila. Sofía de 6 esperaba impaciente su turno mientras seguía con la mirada a uno de los animales. Mientras tanto, en el otro lado del parque navideño, María y Jesús de Cuidad Real, pensaban en su deseo. "Trabajo tenemos, de salud no vamos mal... mmm... pues vamos a ver si nos toca la lotería". Todo se verá.