Personalización

Desde la distribución hasta el color de las puertas, los acabados o el mobiliario de cocina, las opciones de personalización que ofrecen las viviendas de obra nueva son numerosas. De esta forma, los compradores podrán crear su hogar acorde con sus necesidades y gustos.

Eficiencia energética

Debido a las nuevas legislaciones y a la creciente preocupación por el medioambiente, las viviendas de obra nueva son más eficientes energéticamente. La orientación, el aislamiento o técnicas como el ‘Passivhaus’ suponen un ahorro notable.

No hay que hacer obras

Uno de los grandes incentivos de los futuros propietarios para decantarse por la obra nueva es que no existe necesidad ninguna de hacer reformas, pintar ni realizar arreglos. Una vez se efectúa la entrega de llaves, la vivienda está lista para entrar a vivir.

Flexibilidad en el pago

A la hora de realizar los primeros pagos, las viviendas de obra nueva cuentan con la ventaja de que permiten pagar a plazos la entrada a medida que se construye, algo que en el caso de comprar segunda mano hay que desembolsar en el acto.

A estrenar

Para mucha gente, estrenar casa es todo un sueño. Saber que nadie más ha vivido entre esas paredes es un incentivo extra que tienen las viviendas de obra nueva que no se encuentran en otro tipo de inmuebles. Así, pueden formar una familia desde cero, con la casa como un protagonista más.

A la vanguardia

Además de disponer de materiales más modernos, de altas calidades y sostenibles, estos edificios se sirven de las últimas tecnologías en construcción, como la aerotermia, sistemas de iluminación de bajo consumo o fuentes de energía renovables, entre otros.

Zonas comunes de lujo

Suelen tener más servicios y mejores zonas comunes que otras viviendas. Además, aquellas que están situadas lejos del centro de la ciudad, pueden disponer de amplios terrenos para incluir piscinas, pistas de pádel, columpios infantiles o zonas verdes.

Garajes y trasteros

La mayoría de las viviendas de estas características disponen de garajes amplios, adaptados a los coches de hoy en día, que son, en ocasiones, más voluminosos que antaño. Además, todos los hogares cuentan con trasteros en el mismo edificio, algo muy práctico.

Garantía del constructor

La garantía en las viviendas de obra nueva viene recogida en la Ley de Ordenación de la Edificación, en la que se establecen tres períodos diferenciados en función del tipo de desperfecto. Si surge algún problema en ese tiempo, el comprador puede reclamar.

Inversión de futuro

Pueden representar una gran inversión de futuro a largo plazo y es que son viviendas que se revalorizan con el paso del tiempo. Hoy en día, el ladrillo sigue siendo una importante fuente de inversión, tanto para los que compran inmuebles para alquilarlos como los que lo hacen para venderlos.