Una empresa familiar en pleno desarrollo

Fundada en 1975 por Carlos Rivera Ballarín y con el impulso de la segunda generación, que la guió hasta convertirla en lo que es hoy, Ribawood se ha convertido en todo un referente en la valorización de residuos plásticos no peligrosos y la producción de palets de plástico. Una empresa líder que encara el futuro con optimismo y con la mirada siempre puesta en la unión de la familia, que siempre se mantuvo fuerte, a pesar de pasar por diversas vicisitudes y dificultades.

En la actualidad, la fábrica cuenta con doce grandes líneas de inyección, con una capacidad productiva de 2,5 millones de palets al año (con posibilidad de inyectar en alta o baja presión, así como inyección-compresión), siendo el mayor fabricante de palets de plástico del sur de Europa.

Hoy en día, la empresa se encuentra en plena expansión, con inversiones comprometidas con el fin de potenciar la línea de valorización o tratamiento de residuos plásticos no peligrosos, siendo el objetivo de la dirección de la empresa convertirse, antes de tres años, en una de las mayores plantas de tratamiento de residuos plásticos de Aragón y situarse entre las primeras de España.

"A lo largo de los años, hemos ido sustituyendo la granza virgen de plástico, que se utilizaba en la producción de pallets, por material reciclado. Hoy en día un 80% del material utilizado en la producción de palets procede de residuos plásticos recuperados, siendo el objetivo de la empresa llegar al cien por cien dentro de tres años", explican los responsables de la empresa.

Además, dentro de esta política, en una de sus plantas, de más de 15.000 m2, cuentan con sistemas de energía fotovoltaica que les permiten abastecerse cuando lo necesitan, así como una depuradora de aguas, con la que han conseguido alcanzar el nivel de residuo cero en el vertido.

Visión de futuro

 Conceptos que hoy en día pueden resultar novedosos como economía circular o desarrollo sostenible, fueron implantados por Ribawood hace años y están en plena operatividad. "Nos adelantamos a la competencia y a los requerimientos legales, todo ello con el fin de hacer una empresa más eficiente y sostenible", indican.

En este sentido, los retos que deparará el futuro, les obligan a adaptarse para seguir creciendo y para que "nuestros hijos puedan continuar con la actividad de la familia y que siga expandiéndose".

En estos momentos, cuenta con clientes en la Unión Europea, así como en el norte de África, Asia, América del Sur y América del Norte. "Poseemos alianzas con otras empresas, para poder ofrecer un servicio más completo y de calidad en todas las partes del mundo. Y queremos destacar la familia que forma Ribawood, con sus empleados, clientes y proveedores, con los que compartimos nuestro día a día y sin los cuales no seríamos lo que somos hoy en día. Gracias por todos estos años y que sean muchos más", concluyen.