Reducir el impacto medioambiental se ha convertido en una de las mayores preocupaciones de las empresas desde que cuidar el equilibrio natural se ha elevado como cuestión fundamental en la actividad de cualquier sector. La necesidad de reducir la huella en el planeta, en este caso de las empresas de logística, ha derivado en el desarrollo del término ‘logística verde’. Un método de acción al que cada vez se suscriben más compañías del sector.

Pero, ¿qué es la logística verde? En definitiva, se trata de lograr una gestión del trabajo, de la cadena de suministro y de los recursos necesarios para llevarlo a cabo de forma que la empresa logre reducir su impacto en el entorno sin que esto repercuta en su actividad económica.

En general, las empresas lo logran poniendo especial cuidado en la elección de proveedores e infraestructuras, además de trabajando en la optimización del espacio de almacenamiento y la automatización. Es decir, se trata de llevar a cabo acciones que combinen una actividad económica eficiente mientras impulsan el desarrollo sostenible. Por ello, entre estos factores se incluyen, además, otros elementos como los vehículos y el tráfico, la distribución o el reciclaje, conocido también como logística inversa, al generar mayor rentabilidad. Por tanto, su implantación supone cambios sustanciales en el gasto de tiempo y dinero que pueden ser beneficiosos para la empresa que decida adoptarlos en su actividad.

Ventajas y beneficios de la logística verde

El principal beneficio, claramente, es la reducción de la contaminación que genera la empresa, pero también de los costes de transporte, porque aplicar la logística verde supone reducir las distancias y el número de operaciones de transporte de mercancías, siendo este último y el almacenaje los procesos logísticos con mayor impacto medioambiental. Además, la reducción del tráfico supone, a su vez, una disminución de la contaminación acústica, uno de los problemas más habituales de las actividades logísticas de las empresas. 

Otro de los principales beneficios es la reducción de los residuos que se producen en el embalaje, consecuencia de la apuesta por el reciclado, lo que también reduce gastos. Para lograrlo, la clave reside en racionalizar el uso de los recursos involucrados en la actividad logística de la empresa para conseguir una mayor eficiencia energética.

A su vez, la logística verde también involucra a los gobiernos de cada país. Que se invierta en la construcción de carreteras alternativas para rutas destinadas a actividades de distribución de mercancías sería una ayuda a la hora de optimizar el flujo del tráfico, lo que supondría un gran impuso para que las empresas optaran por introducir en su actividad acciones de la logística verde.

Cada vez más, debido a la creciente concienciación de los últimos años, la sociedad busca consumir productos que se han producido siguiendo un desarrollo sostenible que imparte en menor medida en el planeta. Por ello, aplicar la logística verde también conlleva posicionarse en el mercado como una empresa concienciada que se preocupa por su entorno, lo que ayudará a diferenciarse de la competencia, captar nuevos clientes y fidelizar a los actuales.