en colaboración con fundación ilumináfrica

"Nuestras expediciones siguen llevando un rayo de esperanza a El Chad"

Enrique Mínguez Muro, presidente Fundación Iluminafrica, insite en la necesidad de ayudar a los que más lo necesitan y pone en valor el trabajo que realizan los voluntarios de esta entidad.

Enrique Mínguez Muro, presidente Fundación Iluminafrica.
Enrique Mínguez Muro, presidente la Fundación Iluminafrica.
F.I.

El 13 de noviembre de 2007 partió la primera expedición a El Chad, uno de los países más pobres del mundo. Han pasado dieciséis años y en 2023 realizarán la expedición número 65. ¿Qué balance hace de este tiempo?Hay varias conclusiones que se pueden extraer de nuestras actuaciones durante estos años. A mi entender la más importante es que cuando todo el mundo se implica en la consecución de un fin, este se alcanza, aunque inicialmente parezca una utopía. Cuando comenzamos a trabajar en cooperación, casi no sabíamos ni de lo que estábamos hablando. Palabras como contraparte, expatriado, gestión de proyectos… eran nuevas para nosotros. Conseguimos los recursos, tanto técnicos como humanos, necesarios para iniciar nuestra actividad en un tiempo récord y todo gracias al compromiso de muchas personas que sintieron la necesidad de involucrarse en este reto. Dono Manga, la población en la que está emplazado el hospital Saint Michel, fue el lugar en el que implementamos nuestro primer proyecto: “Luz a sus ojos". Es una región olvidada en uno de los países con menos recursos del mundo, El Chad, con ausencia de carreteras, sin electricidad, carencia de todo tipo de servicios. Por todo esto, parecía imposible que allí pudiéramos organizar nada. Los aragoneses tenemos fama de tozudos, aunque como dice Miguel Sebastián, el que fue obispo de Lai y nuestra contraparte durante muchos años, realmente somos tenaces. Quizás por eso, dieciséis años después, nuestras expediciones siguen llevando un rayo de esperanza a la zona.

Las cifras son abrumadoras: 29.860 consultas de oftalmología y optometría, más de 6.957 intervenciones quirúrgicas, se han entregado más de 8.500 gafas graduadas y más de 7.600 gafas de sol. A lo largo de las 65 expediciones han participado un total de 151 cooperantes médicos oftalmólogos y 87 cooperantes no médicos (enfermeros , ópticos…). ¿Cuáles son sus retos de presente y futuro?Mantener nuestro nivel de compromiso y si es posible aumentarlo. Hemos dejado muchos proyectos en el tintero por falta de financiación. Esta sigue siendo la asignatura pendiente de nuestra organización. No hemos sabido transmitir a nuestros conciudadanos la labor que realizamos y tampoco hemos sido capaces de alcanzar un número suficiente de benefactores que nos permitan cierta independencia económica. El material que se utiliza en una operación de cataratas tiene un coste aproximado de unos 100 euros, en muchas de nuestras comisiones se realizan más de 200 intervenciones. Es fácil comprender el esfuerzo presupuestario que esto implica. Seguimos manteniendo una actividad constante en dos hospitales ubicados en el sur de la República de El Chad y estamos intentando iniciar un nuevo proyecto en Senegal.

¿Qué expediciones tienen previsto llevar a cabo este año y cuándo arrancan?Hace apenas una semana acabamos de volver de la ciudad de Saint Louis, en Senegal. Y hemos concurrido a la convocatoria de ayudas a la cooperación que anualmente formula el Ayuntamiento de Zaragoza, con el objetivo de iniciar en ese país un nuevo proyecto para mejorar la salud visual de la población de la zona. La sanidad en Senegal, como en muchas otras partes del planeta, no es universal ni gratuita y eso provoca que muchas personas no tengan acceso a las consultas médicas que, por otra parte, están saturadas.

"Siempre se puede hacer algo más. Optimizar los recursos es un reto constante y, sin duda, si se contara con más medios sería factible hacer muchas más cosas"

¿Sigue siendo El Chad el centro de sus operaciones?Así es. El Chad, como no podía ser de otra manera, continúa siendo el centro de nuestras actividades. Antes de final de año se van desplazar dos comisiones asistenciales, una a cada uno de los dos hospitales con los que colaboramos. La situación económica del país ha mejorado muy poco y las necesidades siguen siendo las mismas. Es más que seguro que van a seguir necesitando la ayuda internacional durante décadas.

¿Desde la entidad que presiden están satisfechos del trabajo realizado? ¿Se podría hacer más con más ayuda material?Siempre se puede hacer algo más. Optimizar los recursos es un reto constante y, sin duda, si se contara con más medios sería factible hacer muchas más cosas. Hay amplias zonas del planeta en las que la población carece de lo más básico. Nuestra Fundación trabaja en salud visual, pero no por ello dejamos de ver los múltiples problemas que se dan en otras áreas. Y lo que ocurre en El Chad puede extrapolarse a todo el Sahel. Si no hay un compromiso internacional para mejorar las condiciones de vida en muchas regiones del planeta los flujos migratorios van a ser una constante en los próximos años.

¿De qué manera se puede ayudar para hacer posible este proyecto?En nuestra organización todas las personas que quieran ayudar son bien recibidas. Podríamos decir que cualquiera va a poder colaborar con nosotros, incluso de forma directa, participando activamente en nuestro organigrama ejecutivo. Aunque nuestra labor es muy concreta: la salud visual. En todas las oenegés hay múltiples actividades diarias a realizar y que están abiertas a todo tipo de conocimientos: logística y control de inventarios, gestión de materiales, creación de contenidos para las redes sociales, administración económica, documentación y trámites con los administraciones pública, y hasta lo menos complicado: ir a hacer recados. A través de nuestra web www.iluminafrica.com todos los que sientan la inquietud de colaborar en primera persona pueden contactar con nosotros sin ningún compromiso.

Además, cuentan con la figura del benefactor.Cierto. También tenemos institucionalizada la figura de benefactor de la Fundación, una pequeña aportación económica anual puede obrar un pequeño milagro. Sólo con 20 euros un niño puede obtener las gafas que necesita o por 100 euros alguien va a ser operado de cataratas. Lógicamente, cualquier tipo de donación va a ser bien recibida, además no olvidemos que las cantidades entregadas a las oenegés son desgravables en la declaración de renta. Y todavía hay otra posibilidad: simplemente participando en alguna de las muchas actividades que organiza nuestra fundación: cena y vermut solidario; el festival musical, que será el viernes 20 de octubre, en el Teatro Corazonistas; venta de lotería, y productos corporativos de merchandinsing; y, cómo no, donando esas gafas de sol o de presbicia que ya no utilizamos.

"Las oenegés subsisten fundamentalmente gracias a las ayudas de muchos donantes, muchos de ellos anónimos. No defraudarlos e intentar que la mayor parte del dinero que se recibe vaya directamente al fin fundacional es prioritario"

¿Cómo gestionan las ayudas que reciben?En Iluminafrica tenemos a gala el hecho de que el 90% de nuestro presupuesto se emplea directamente en cubrir los gastos derivados de la realización de nuestros proyectos en el terreno. Del 10% restante, la mayor parte se destina a satisfacer los costes derivados de la contabilidad, que es gestionada por una empresa externa y para abonar la auditoria anual de cuentas a la que todos los años se somete de forma voluntaria nuestra fundación. Las oenegés subsisten fundamentalmente gracias a las ayudas de muchos donantes, muchos de ellos anónimos. No defraudarlos e intentar que la mayor parte del dinero que se recibe vaya directamente al fin fundacional es prioritario. Las organizaciones del tercer sector debemos ser ejemplarizantes en todo lo relacionado con la rendición de cuentas y las buenas prácticas. Todos los años colgamos en nuestra web un resumen de la contabilidad y de la auditoria realizada.

Además del apoyo económico, es fundamental el papel de los voluntarios, ya que sin estos no sería posible llevar a cabo la iniciativa. ¿Son ellos el principal pilar de Ilumináfrica?El voluntariado realmente es la razón de ser de todas las oenegés. En mayor o menor proporción todas estas organizaciones incluyen en su estructura un gran número de voluntarios. Si tuvieran que destinarse salarios para pagar todos esos trabajos la mayoría de los proyectos de solidaridad resultarían inviables. La figura del voluntario nos parece tan relevante que hemos creado una distinción, el diploma de 'Amigo de Ilumináfrica', que se entrega anualmente en nuestra cena benéfica a aquel voluntario que haya destacado por su compromiso con Iluminafrica. Nosotros tenemos la suerte de contar con un grupo bien cohesionado de personas que llevan mucho tiempo en nuestra organización. Es de justicia nombrar la labor de José Antonio, nuestro secretario, liberado desde hace años de las obligaciones laborales y que ha canalizado su inagotable capacidad de trabajo, que es mucha, en Ilumináfrica.

Enrique Mínguez insiste en la necesidad de ayudar a los que más lo necesitan.
Enrique Mínguez insiste en la necesidad de ayudar a los que más lo necesitan.
@almozara

¿Qué les diría a los futuros cooperantes? ¿Viajar a El Chad les cambiará la vida? ¿De qué manera?Esto se lo diría a todo el mundo, no sólo a los cooperantes: abre tu mente, se valiente y desplázate a uno de los múltiples lugares de este universo en los que sencillamente 'no hay de nada', aunque sea por un pequeño espacio de tiempo. tres días, una semana, con eso es suficiente. La experiencia cambiará tu mente para siempre y, entre otras cosas, entenderás porque el mar está lleno de pateras con personas que se juegan la vida intentando buscar un futuro. Familias que comen una sola vez al día y no necesariamente todos los días; hospitales a los que te trasladan en muy mal estado de salud y casualmente ese día no está el médico; medicamentos que hay que ir a buscar a una ciudad que está a más de 100 kilómetros de tu domicilio, en un sitio en el que no hay transporte público; o enfermos que saben que la insulina que necesitan para su diabetes recién diagnosticada se debe mantener refrigerada, pero que en su ciudad no hay suministro eléctrico. Personas que ven que este año ha llovido poco, la cosecha será mala, la guerra de Ucrania casi ha duplicado el precio del grano, el saco de 25 kilos de mijo cuesta 50.000 francos, frente a un salario de 75.000 (poco mas de 100 euros). Personas que son conscientes de que en un mes en su casa se consumen 50 kilos de grano y que se preguntan, a partir del día 20, a quién dejarán sin comer. Sé que estas palabras suenan a película de ciencia ficción pero esto es real y está sucediendo mientras estás leyendo estas líneas.

"En estos países pobres hay personas que ven que en un mes en su casa se consumen 50 kilos de grano y que se preguntan, a partir del día 20, a quién dejarán sin comer. Sé que estas palabras suenan a película de ciencia ficción pero esto es real y está sucediendo mientras estás leyendo estas líneas"

A nivel personal, ¿qué ha supuesto para usted Ilumináfrica? Colaborar con una oenegé resulta muy gratificante, ya que inmediatamente te das cuenta de que estás participando en algo realmente importante. Bien es cierto que mantener el alto grado de actividad que requiere una fundación como Ilumináfrica es un desafío constante y supone un trabajo notable, pero realmente la recompensa compensa con creces el esfuerzo.

¿Y a nivel profesional?A nivel profesional es una oportunidad única. En África hay muchos ciegos esperando a que llegue un oftalmólogo y les devuelva la visión. En nuestro medio afortunadamente es muy inhabitual encontrarte con casos desesperados, pero allí están a la orden del día.

¿Qué se encuentra cuando llega a El Chad para repetir una y otra vez?Ayudar a los demás es algo que todos los médicos llevamos inscrito en el ADN, pero la cooperación es algo más, es como una droga, y, si como en nuestro caso, se tiene la opción de sacar a una persona de la ceguera, el efecto adictivo es doble. La satisfacción tanto personal como profesional es de tal intensidad que se te olvidan las penurias del viaje, las vacaciones que estás robando a tu familia, los mosquitos que te pican y que a lo mejor te están trasmitiendo la malaria, el calor que no te deja conciliar el sueño...Llevo más de 15 expediciones a El Chad y en todas ellas ha habido algún acontecimiento que me ha hecho pensar: solo por esto merecía la pena haber venido.

Usted siempre ha insistido en la importancia de enseñar a pescar a los profesionales del personal local, no solo a darles el pez. ¿Qué papel juega la formación de estas personas a la hora de llevar a cabo una labor preventiva?Es indudable que los problemas de una sociedad no se resuelven a menos que los miembros que la componen se impliquen para solucionarlos. La acción exterior puede implementar programas o proyectos que mejoren las condiciones, pero para mantenerlos en el tiempo es necesario que los agentes locales estén comprometidos. Uno de los problemas de muchas zonas del mundo es la falta de profesionales. Hay que ser conscientes de la gran importancia que tiene la educación y la formación de las personas para poder cambiar el mundo.

¿Qué supone la ceguera en un país como este?La ceguera es un terrible problema en cualquier lugar. En nuestro medio esta minusvalía casi siempre es el resultado de alguna grave enfermedad, que no se ha podido resolver. En los países carentes de recursos habitualmente la causa es otra: la falta de medios económicos para tratarla o evitarla. Hemos creado un eufemismo para describir esa situación y lo denominamos 'ceguera evitable'. Es lamentable que, en pleno siglo XXI, todavía persistan estas diferencias.

¿Es Fundación Ilumináfrica un rayo de esperanza para miles de personas que, lejos de quedarse ciegas, pueden llevar a cabo un proyecto de vida normalizado?Nuestra organización es pequeña y es por tanto evidente que el impacto que tienen nuestras acciones, si lo comparamos con las inmensas necesidades de la población global, es muy limitado. Pero en Iluminafrica tenemos un lema: 'Todos podemos hacer algo para mejorar los problemas de las personas'. Si conseguimos que en todas las partes y en todo el mundo surjan pequeños movimientos de cooperación llegaremos a tener un auténtico terremoto de solidaridad.

Cartel anunciador.

¿Cómo puedo participar?

Las personas interesadas podrán participar en tres categorías diferentes: Ceguera y otras discapacidades; Cooperación y África. En las bases del concurso se recoge que los microrrelatos deberán ser creaciones originales, que no hayan sido presentadas a ningún otro concurso, convocatoria o premio. Si los participantes son menores de edad, deben enviar sus textos a través de sus padres o tutores legales. Se aceptará un relato por autor en cada una de estas categorías. Por cada una se otorgarán tres premios: un ganador y dos accésits

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Cartel.

Musical solidario

Este viernes, el Teatro Corazonistas de Zaragoza acogerá el musical `Eterno Greased Lighting´ que se celebra gracias a la colaboración artística de la asociación cultural El gran Telón y cuya recaudación de la taquilla irá destinada a continuar con la labor humanitaria de la Fundación Ilumináfrica. Más información sobre las entradas en www.iluminafrica.com. También hay habilitada una fila 0 para contribuir con el proyecto.
Ibercaja: ES03 2085 5212 4103 3126 9518 o al número de bizum: 03595
Caixabank: Es15 2100 6435 6121 0023 7825 o al número de bizum: 03437

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