Setenta y dos veces ha pasado el Tour de Francia por la ciudad gala de Pau. La segunda más visitada por esta competición, tan sólo por detrás de París, donde siempre finaliza esta prueba ciclista.

Hay que destacar que las infraestructuras hoteleras y la ubicación privilegiada de la ciudad, que se oferta como un balcón sobre los Pirineos, permite que sirva de salida o llegada de etapas que incluyen famosos puertos de montaña como el Aubisque, el Marie-Blanque e incluso el Tourmalet.

Desde hace varios años, la ciudad presidida por François Bayrou cuenta con un concejal municipal responsable de la bicicleta, Josy Poueyto, que ha forjado lazos muy estrechos con la ASO, la organizadora del Tour de Francia. Y lo dice todos los años: «Pau es candidata permanente para las salidas o llegadas». Tanto es así que, para el regreso del Tour de Francia femenino el próximo año, Pau acogerá la finalización de esta prueba, que estuvo abandonada durante un tiempo.

Esto se debe a que el interés por el Tour de Francia no ha escapado a los políticos. Millones de espectadores de todo el mundo pueden descubrir los encantos de las regiones francesas a través de su televisión. Tanto es así que, desde hace seis años, Béarn cuenta con sus propios vehículos en la caravana publicitaria, que ensalzan tanto a Pau como al ‘Petit train d’Artouste’ o incluso la Garbure y al rey Enrique IV, monarca del siglo XVI muy conocido en Francia, y nacido precisamente… en Pau.

Fue la Agencia de Atracción y Desarrollo Turístico la que tomó la iniciativa hace unos años de defender de este modo el destino ‘Béarn’. Acaba de firmar un contrato para tres años más con El Tour de Francia. Por su parte, el Departamento de los Pirineos Atlánticos, que incluye tanto Béarn como al País Vasco, también apoya la idea de que las grandes citas ciclistas pasen por sus tierras.

No en vano, el próximo año se celebrará una etapa del Tour que unirá el País Vasco español con el francés (Amorebieta-Etxano-Bayona) a principios de julio. También otra etapa (Pau-Laruns) reforzará la presencia del pequeño pueblo del valle de Ossau.

Mejoras en carreteras

De forma más general, el Consejo Departamental de los Pirineos Atlánticos ha comprobado la atracción de cicloturistas de todo el mundo por los puertos de los Pirineos. Del tal modo que, cada año, varios domingos durante el verano, la comunidad que gestiona las carreteras de montaña, las cierra a los coches para permitir a los amantes de la bicicleta subir los puertos de Aubisque o La Pierre-Saint-Martin como los campeones. La operación ‘on s’y col’, un juego de palabras muy francés, ¡tiene cada año más éxito! Tanto es así que el Departamento ha elaborado un plan específico de acondicionamiento de los pasos para cicloturistas.