Grandes Vinos y Viñedos

Preservar el legado de Cariñena. Es la razón de ser de Grandes Vinos y Viñedos, una bodega firmemente comprometida con el medio ambiente. La inteligencia artificial aplicada a la agricultura de precisión para la optimización del riego en los viñedos, el tratamiento integral de los residuos y el uso de energías renovables les sitúa a la cabeza del sector en esta materia. Por todo ello, esta bodega ha recibido una distinción en materia medioambiental en los V Premios HERALDO DEL CAMPO. "Todos los galardones son bienvenidos. Nos ayudan a seguir cuidando y potenciando nuestro trabajo para hacer vinos no solo de alta calidad, sino con el menor impacto medioambiental y social posible", afirma Manuel García, director de Márquetin de la compañía. Grandes Vinos está comprometida con la sostenibilidad en toda la cadena de producción, desde el viñedo hasta el envasado. Uno de sus mayores logros es la utilización de "técnicas de confusión sexual con feromonas en lugar del uso de pesticidas para el tratamiento de enfermedades, lo que evita el impacto medioambiental que producen las demás técnicas de control de plagas y mantiene el valor ecológico, reduciendo hasta un 75% el uso de fitosanitarios a nivel global". En el ‘packaging’ se sirven de botellas ligeras, cartones 100% reciclados y tintas amigables con el medio ambiente para reducir su huella de carbono.
Asimismo, cuentan con una instalación de un campo solar en el techo de la nave para reducir el consumo energético, disponen de un punto doble de recarga para coches eléctricos gratuito, apuestan por la iluminación con tecnología LED y han dispuesto un automatismo del alumbrado con sensores de presencia en los almacenes de materia prima y producto terminado.

Tauste, Centro Gestor de Estiércoles

La gestión de los purines es fundamental para la sostenibilidad ambiental en el medio rural. Esto es algo que saben muy bien en el Centro Gestor de Estiércoles de Tauste, una empresa que nació con el objetivo de reducir la emisión de amoniaco que producen dichos estiércoles ganaderos, minimizando así el impacto medioambiental de las explotaciones porcinas. Con una clara vocación por el campo, la innovación y la sostenibilidad, la compañía ha liderado una investigación que consiste en la instalación de una planta fotovoltaica flotante sobre las balsas de purines, lo que ayuda no solo a reducir la emisión de gases nocivos sino también a producir energía limpia. Esto les ha servido para recibir una distinción de honor en la categoría de Responsabilidad Medioambiental. Fernando Ederra, gerente de la compañía, se muestra entusiasmado con el galardón porque "nos da visibilidad, mejora nuestra imagen en el sector y nos anima a seguir trabajando en la misma tónica". Desde el Centro Gestor de Estiércoles de Tauste apuestan por la economía circular, valorizando el purín porcino como abono para los cultivos y evitando el uso de fertilizantes minerales. Aseguran que el objetivo es "lanzar al mercado una solución para la reducción de emisiones que, además, sea rentable para las granjas", algo que evidencian los resultados de la mencionada investigación. Fernando Ederra recalca que los ganaderos y agricultores son los más interesados en cuidar de la tierra y el bienestar animal, ya que es su sustento vital. «Si nosotros no cuidamos el campo, ¿quién lo va hacer?», se pregunta.
La normativa europea está obligando a reducir las emisiones de amoniaco que producen los estiércoles, por lo que todos los esfuerzos en avanzar en esta dirección suponen una gran noticia para el sector.