Orgulloso y emocionado. Así se sintió el doctor Juan Carlos Pina al recibir el Premio Nacional de Salud Bucodental Siglo XXI otorgado por El Suplemento a la Comunidad de Aragón. Este evento, que se celebró el pasado 3 de noviembre en el Hotel Westin Palace de Madrid, es un reconocimiento a la excelencia en la práctica odontológica y a la apuesta por la innovación, destacando a los premiados como referente en sus respectivas comunidades autónomas. "Este premio nos enorgullece a todo el equipo. Hay excelentes compañeros en Aragón que también serían dignos de este galardón, así que es un honor haber sido elegidos. Supone un impulso para seguir día a día. Aunque lleva mi nombre, este es un reconocimiento a todo el equipo", asegura el doctor.

Para Juan Carlos Pina, los profesionales que le acompañan en su día a día son clave para lograr un trato personalizado y excelente para sus pacientes. "Sin ellos los retos se verían limitados y devaluados. Unos vienen, otros se van y otros se quedan aportando todos su esfuerzo y su dedicación. Hablamos de auxiliares, higienistas, protésicos, recepcionistas, colaboradores y compañeros y un largo etcétera", señala. También lo son sus maestros, que le ofrecieron una formación académica y práctica del máximo nivel. Menciona a los doctores Angel Bustillo, de Pamplona; Istvan Urban, de Budapest; Sacha Jovanovich, de Los Angeles, y Fromovich, de Telaviv.

En su clínica, situada en avenida de Compromiso de Caspe 6, ofrecen servicios de todas las especialidades que los pacientes puedan requerir: odontología conservadora, endodoncia, ortodoncia, estética dental, implantología, regeneración ósea…

La adquisición de nuevas técnicas y materiales, así como de tecnologías vanguardistas ha sido una constante desde los años ochenta. Sin embargo, aunque los avances tecnológicos son positivos, hay algo que no debe cambiar: la relación médico-paciente. "La creación de un espacio de confianza entre el profesional y el paciente es fruto de la aplicación, como sanitarios que somos, de los principios hipocráticos que estamos obligados a construir cada día", concluye.