‘Mi casa, mi hogar’, el plan para una vida en comunidad

El pasado noviembre, la entidad social Kairós se unió al proyecto ‘Mi casa, mi hogar’, de Plena Inclusión Aragón (PIA), con la apertura de dos pisos en los que vivirán seis personas con discapacidad intelectual y grandes necesidades de apoyo. En los últimos meses, los trabajadores de la organización han estado preparando los planes de tránsito de estas personas e impartiendo numerosas horas de formación para los profesionales que van a realizar las tareas de apoyo.

Lo que para muchos ciudadanos es el curso natural de la vida, elegir dónde y con quién vivir, es inimaginable para otros. Las oportunidades de vivir en casas en comunidad son menores para las personas con discapacidad intelectual con un elevado nivel de dependencia, y las familias, profesionales y personas de apoyo son las que toman decisiones por ellas.

A pesar de las recomendaciones europeas y de que la vida independiente y en comunidad es un derecho, en España no hay leyes que lo garanticen y que apoyen la desinstitucionalización. Este es el mayor reto para las entidades que forman PIA, que las personas puedan residir y recibir los apoyos que necesitan en su comunidad y, sobre todo, que puedan tener control sobre sus propias vidas.

El objetivo del proyecto es promover el tránsito de personas con discapacidad intelectual y/o del desarrollo institucionalizadas hacia viviendas y actividades en la comunidad, especialmente de aquellas con amplias necesidades de apoyo. Con esta iniciativa, Plena Inclusión quiere proponer un nuevo modelo de gestión de los cuidados de larga duración a través de la investigación, la experimentación y la innovación. Para ello, cuenta con el apoyo de los fondos europeos y también del Gobierno de Aragón a través del Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales.

66 viviendas

En los próximos dos años y gracias al plan, se pondrán en marcha en España 66 viviendas en comunidad en las que 284 personas con discapacidad intelectual y del desarrollo tendrán la oportunidad de vivir de esta forma. Dos de esas viviendas serán impulsadas por Kairós, las cuales facilitarán el tránsito a la vida en comunidad a seis personas con grandes necesidades de apoyo.

Si la experiencia piloto es positiva, el Ejecutivo autonómico se ha mostrado favorable a continuar trabajando en esta línea, más allá del fin del proyecto. De hecho, ha adquirido el compromiso de seguir manteniendo este modelo residencial para las personas participantes en el mismo a partir del año 2024.