en colaboración con el Colegio Oficial de Arquitectos de Aragon

¿Sabes cuál es el punto de partida para rehabilitar un edificio?

Las ayudas europeas financian la elaboración del Libro del Edificio Existente, un documento básico para acometer una reforma integral.

Fernando Avellanas, gerente y secretario técnico del COAA.
Fernando Avellanas, gerente y secretario técnico del COAA.

Pocas dudas quedan ya sobre los numerosos beneficios que se derivan de la rehabilitación de las viviendas y los edificios, especialmente si se atiende a la notable reducción de su factura energética. Por si esto no fuera suficiente, hay que sumar ahora la posibilidad de subvencionar estas actuaciones inmobiliarias con las ayudas que la Unión Europea ha puesto en marcha a través de los fondos Next Generation.

Estas se distribuyen en cinco programas que abarcan intervenciones a nivel de barrio, edificio, vivienda y de asesoramiento de proyectos. Entre ellos, cabe destacar el referido a la elaboración del Libro del Edificio Existente (LEEx), la mejor herramienta para planificar cómo conseguir el mayor ahorro energético en un inmueble.

El documento se estructura en varias fases: en la primera parte, se encontrarían el diagnóstico y chequeo del edificio, además de las cuestiones referidas a su correcto uso y mantenimiento; y en la segunda, se abordaría el análisis de las potenciales mejoras, así como su planificación en el tiempo. "Es un traje a medida para cada edificio", explica Fernando Avellanas, gerente y secretario técnico del Colegio Oficial de Arquitectos de Aragon (COAA), quien lo define como el punto de partida en el proceso de rehabilitación para plantear una reforma integral ordenada y de máxima eficiencia. De hecho, el LEEx se exige para optar a las subvenciones del programa 3, referido a la mejora de la eficiencia energética de edificios, y al programa 1, dentro de los llamados Entornos Residenciales de Rehabilitación Programada. El gerente del COAA asegura que es el vehículo idóneo para plantear intervenciones óptimas y descartar otras que no lo sean. En definitiva, el objetivo es "generar una cultura de la rehabilitación entre los ciudadanos a través de un sencillo documento", afirma Avellanas.

Es el arquitecto el redactor del Libro del Edificio Existente, con la consecuente garantía de calidad. El técnico tiene a su disposición una herramienta informática que facilita la recogida de datos del inmueble y la relación con otras administraciones públicas, entre otras prestaciones. Esta aplicación ha sido una iniciativa 100% aragonesa del Colegio Oficial de Arquitectos de Aragón y los Colegios de Aparejadores de Aragón, que se ha extendido por el ámbito nacional y que sirve de precedente para la próxima implantación del Libro Digital del Edificio europeo.

Es posible encontrar más información sobre las subvenciones y los trámites, en las Oficinas de Ayuda a la Rehabilitación del Colegio Oficial de Arquitectos de Aragón y en rehabilitaaragon.com

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