obra nueva

Edificios verdes para el bienestar del planeta

La arquitectura sostenible se ha convertido en una tendencia en auge en la obra nueva

La arquitectura sostenible es el futuro.
La arquitectura sostenible es el futuro.
Freepik

La población es cada vez más consciente de la importancia de cuidar el medioambiente. Esta nueva realidad está provocando grandes cambios a nivel mundial, también en el sector de la construcción. Ante esta exigencia verde demandada por la sociedad, la arquitectura sostenible se ha convertido en una tendencia en auge.

Este concepto, que surgió allá por los años 60, hace referencia a un tipo de construcción respetuosa con el medioambiente desde su planificación y diseño hasta el fin de su vida útil. No se trata únicamente de utilizar unos materiales concretos, sino que se extrapola también a elementos como la orientación del edificio, el aislamiento térmico o el uso de energías renovables para su abastecimiento posterior. La idea, a nivel general, es minimizar lo máximo posible la huella de carbono de dicha construcción.

Un edificio eficiente energéticamente supone un notable ahorro en las facturas mes a mes.

Estas viviendas eficientes energéticamente ofrecen a sus usuarios no solo la oportunidad de reducir su huella de carbono y vivir de forma más amigable con el planeta, sino también de disfrutar de un notable ahorro en sus facturas todos los meses, ya que se reduce drásticamente la necesidad de calefacción y aire acondicionado.

Para saber si una vivienda es respetuosa con el medioambiente hay que acudir al certificado energético, que le otorgará una letra de la ‘A’ a la ‘G’ según su eficiencia, siendo la primera la más alta. Para ello, se valoran características como el sistema de calefacción y refrigeración, la ventilación, la iluminación, los sistemas de aislamiento o el agua caliente, entre otros.

La legislación, tanto a nivel europeo como español, también está encaminándose a elaborar normas que regulen la obra nueva, estableciendo ciertas obligaciones en matera de sostenibilidad que deben cumplir los nuevos proyectos.

Asimismo, el Gobierno de España está incentivando que las edificaciones antiguas sean más respetuosas con el medioambiente a través, por ejemplo, del Programa de Fomento de la Mejora de la Eficiencia Energética y la Sostenibilidad en Viviendas, por el que los propietarios reciben ayudas de hasta 12.000 euros para realizar mejoras en las instalaciones para que reduzcan su impacto ambiental. 

Las claves de los edificios sostenibles

Ubicación
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Ubicación y orientación

Tener en cuenta el lugar en el que se levantará el edificio es uno de los factores más relevantes de la arquitectura sostenible. Una ubicación y orientación adecuadas permitirán aprovechar al máximo las horas de luz natural, tanto para reducir la necesidad de la utilización de luz artificial como para captar el calor en invierno y proteger a los hogares del sol en verano, reduciendo así la necesidad de calefacción y aire acondicionado respectivamente. De esta manera, en las construcciones de obra nueva en España debería primar la orientación sur, en la que el sol estará siempre presente en otoño e invierno y se limitará a las horas centrales del día en verano.

Materiales
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Materiales

El uso de materiales sostenibles para la construcción de los edificios de obra nueva se ha convertido en un factor fundamental. Para reducir todo lo posible el impacto ambiental de los edificios, resulta necesario servirse de materiales reciclados que generen pocos residuos, que causen poca contaminación durante su fabricación, con una vida extensa, que no necesiten mucho mantenimiento y eficientes en términos energéticos. Esto es lo que caracteriza a los llamados materiales ecológicos, que se extienden tanto a los elementos de construcción como a los aislantes y las pinturas, entre otros. La madera, la celulosa, la piedra, la lana de roca o los polímeros sintéticos son algunos ejemplos.

ventanas
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Aislamiento térmico

En este sentido, el Passivhaus se ha convertido en una de las grande tendencias en la construcción de obra nueva. Este estándar permite diseñar casas y edificios que reducen un 75% sus necesidades de calefacción y refrigeración. Paredes exteriores con una baja transmitancia térmica, ventanas y puertas de altas prestaciones, ausencia de puentes térmicos, ventilación mecánica con recuperación de calor o la estanqueidad del aire para que no haya corrientes son algunas de las claves de este sistema. Todo esto está encaminado a lograr un consumo de energía casi nulo, que además tiene consecuencias muy beneficiosas para los propietarios de las viviendas, tanto a nivel de bienestar como en el ahorro mensual de sus facturas.

Renovables
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Energías renovables

Además de reducir el consumo energético, los edificios verdes apuestan por la instalación de energías limpias como placas solares, sistemas de calefacción por suelo radiante o iluminación con tecnología LED.
La autosuficiencia energética es el futuro. Asimismo, la domótica se ha convertido en un factor fundamental para aumentar la eficiencia del consumo energético, ya que permite a sus usuarios la posibilidad de controlar desde su dispositivo móvil el encendido y apagado de la calefacción, el aire acondicionado, los electrodomésticos o las luces. Todo ello conlleva una notable reducción de la contaminación que genera el edificio y un ahorro en las facturas de los propietarios.

Reciclar
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Reciclaje

Dentro de un edificio viven muchas personas que generan residuos todos los días y, aunque visto de forma individual podría parecer poco, todo junto tiene un impacto muy negativo en el medioambiente. Hay muchos materiales del día a día que pueden reciclarse, tales como el cartón, el plástico o el cristal. Por ello, la instalación de papeleras específicas en las zonas comunes de los edificios puede ser una manera magnífica de fomentar el hábito del reciclaje entre sus vecinos, minimizando los inconvenientes de tener que desplazarse hasta los contenedores de la calle. Asimismo, se puede añadir un cuarto cubo para los productos de origen orgánico.

Agua
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Ahorro de agua

La eficiencia de este elemento natural es otro de los factores a tener en cuenta en los edificios verdes, tanto durante su construcción como posteriormente. Para ello, se hace imprescindible la instalación de mecanismos de gestión de las aguas y residuos en las zonas comunes de las viviendas. Esto permitiría, por ejemplo, el reaprovechamiento de aguas grises, que son aquellas que ya se han usado en la ducha, filtrando el agua y devolviéndola a los retretes para darle un segundo uso. A esto se le suman otras opciones como la elección de sanitarios de alta eficiencia, el uso de sensores de movimiento, la instalación de medidores de agua o el uso de aguas pluviales.

REALIZADO POR AML
Este contenido ha sido elaborado por Aragón Media Lab, unidad Branded Content de Henneo.

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