La industria agroalimentaria y la restauración tienen en Caja Rural de Aragón un fiel aliado. Tal y como explica Rubén Artieda, director de Negocio Agrario de la primera entidad aragonesa de crédito cooperativo, "llevamos en nuestro ADN la colaboración y cercanía con estos sectores. En nuestros cafés, bares y restaurantes, se pone en valor los excelentes productos que generan nuestros agricultores y ganaderos. Tenemos un gran tesoro. Producimos alimentos de alta calidad cada vez más reconocidos. Desde nuestros inicios hemos estado impulsando este sector. Estamos a su lado siempre que nos necesitan".

Caja Rural de Aragón cuenta con una importante red de oficinas en todo el territorio. "Desde ellas, con un equipo entusiasta y comprometido, ayudamos a los productores de alimentos y a las empresas que se encargan de su transformación. Colaboramos con líneas específicas de financiación, con productos y servicios especializados cubriendo sus necesidades financieras. Gracias a muchos años de trabajo con este sector somos líderes en nuestro territorio", señala.

"La importante inversión en comunicación y marketing impulsada en los últimos años desde el Gobierno de Aragón y desde las Cooperativas Agroalimentarias Aragonesas, ha logrado poner en valor los tesoros gastronómicos de nuestra tierra. Somos un referente en la producción de alimentos de calidad. Estas industrias ayudan y colaboran en la vertebración del territorio, generando puestos de trabajo y proyectos de vida en nuestros pueblos del medio rural", explica Rubén Artieda.

El compromiso del sector con la sostenibilidad no es nuevo. "Las personas que se dedican a la agricultura y ganadería cuidan de nuestro paisaje. Se preocupan por ser cada día más eficientes en el consumo de agua o de la producción de alimentos saludables. Quieren lo mejor para nuestra tierra. Gracias a estos hombres y mujeres contamos con entornos naturales envidiables y prósperos", concluye el director de Negocio de Caja Rural de Aragón.