COSTA

Una pareja encuentra su apartamento de Salou 'okupado' por una familia

El matrimonio zaragozano ha puesto denuncia en la Policía Local y los Mossos d'Esquadra. En el piso vivía una familia marroquí que dijo que se lo había alquilado por 400 euros otro compatriota.

El matrimonio ha denunciado el caso en Tarragona.
Una pareja encuentra su apartamento de Salou 'okupado' por una familia
ESTHER CASAS

Iban a pasar la Cincomarzada a su apartamento de la playa, pero acabaron sufriendo uno de los peores fines de semana que recuerdan. Un matrimonio zaragozano, J. A. G. y D. A. descubrieron, al llegar a la segunda residencia que tienen en Salou desde hace 20 años, que no podían entrar en la vivienda. En ella estaba viviendo, sin su conocimiento, una familia marroquí compuesta por tres adultos y dos niños, que aseguraron que otro compatriota les había arrendado el piso por 400 euros hacía aproximadamente 15 días y que desconocían que era propiedad de los zaragozanos.

Todo ocurrió el 5 de marzo por la mañana. «Cuando intentamos entrar en la casa, habían cambiado la cerradura. No sabíamos que pensar, pero todavía nos quedamos más sorprendidos cuando escuchamos voces dentro y nos abrieron los que decían estar alquilados legalmente en nuestra propia casa», relata el matrimonio que, inmediatamente, llamó a la Policía Local. Los ocupantes -un matrimonio, un hermano del padre y dos pequeños- accedieron a abandonar el piso voluntariamente ese mismo día, aunque el proceso se alargó porque era necesario asegurar que los dos menores tendrían un lugar en el que pasar esa noche en buenas condiciones.

Como informó 'Diari de Tarragona', los propietarios han presentado dos denuncias -en la Policía Local y en los Mossos d'Esquadra- y ya hay un sospechoso. Los Mossos explicaron que el caso se está investigando y que hay un presunto autor de los hechos identificado como Mohammed E. Hace unos días, se ampliaron diligencias y se enviaron al juzgado.

Por otra parte, la pareja sospecha que el responsable ha podido meter a varias familias sucesivamente en el apartamento desde el mes de enero, aunque no tienen la constatación. Hacía varios meses que no acudían al apartamento y han detectado que ha desaparecido buena parte del mobiliario, aunque esto no se atribuye directamente a la familia que se encontraba residiendo en el piso.

Faltan varios muebles

«Falta un mueble de la entrada, los sofás, el televisor y muchas más cosas, como utensilios de cocina o adornos de la casa. Se te cae el alma los pies cuando entras en tu vivienda y no la reconoces. Además, aún tuvimos que demostrar que ese apartamento era nuestro. En ese momento, te sientes impotente», recuerdan. «Sabemos que de esto no vamos a recuperar nada, pero casi lo peor es el trastorno que te causan (ya han tenido que volver en 3 ocasiones para ampliar denuncia, limpiar el piso o dar parte al seguro) y la sensación de que han entrado en tu casa», añaden.

Cuando sucedieron los hechos, varios vecinos del bloque acudieron para dar fe de que la pareja tiene esta segunda residencia desde hace unos 20 años. Además, dentro de la vivienda se encontraron varios bombines diferentes.

En el conjunto residencial hay unos 200 inmuebles, algunos ocupados durante todo el año, y es frecuente que haya pisos alquilados, a menudo a inmigrantes.

Los vecinos sí que recalcan que en los últimos tiempos ha habido varios robos en las viviendas. En muchos casos, los ladrones se han llevado únicamente la televisión, a pesar de que causaron un gran destrozo en ventanas y rejas para poder acceder. En estos casos, y aunque se trate de segundas residencias, la Policía aconseja invertir en buenos sistemas de seguridad.

De momento, la causa está abierta, aunque muchos vecinos sospechan de un inquilino cuyo nombre coincide con el del sospechoso. Esta persona estuvo alquilada hace algún tiempo en un apartamento cercano y fue desahuciado por impagos a finales del año pasado.

La familia que estaba viviendo en el piso identificó al arrendador y aseguró que vivía en una localidad cercana. Insistieron en que, aunque no había contrato de por medio, pactaron darle 400 euros cada mes en concepto de alquiler.

Casos en la Costa Brava

Este tipo de prácticas son comunes desde hace tiempo en las zonas de playa, aunque los Mossos d'Esquadra recalcan que hasta ahora el volumen de casos que han encontrado en la Costa Dorada, muy frecuentada por aragoneses, es muy pequeño. «Sí que solemos encontrarnos con algunos en la Costa Brava. A menudo, los infractores aprovechan que se trata de la segunda residencia de un extranjero y que no volverá hasta el verano», añadieron.

Hace algún tiempo, otra familia que tiene una casa de verano en L'Escala (Gerona) denunció que una pareja con hijos llevaba cuatro meses viviendo en su propiedad. Esta familia insistió en que alguien les ofreció el alquiler cuando paseaban por el paseo marítimo de la localidad y aseguraron haber hecho reformas por valor de 2.000 euros. Estos se negaban a abandonar la casa.

La casuística de este tipo de delitos es variada. En ocasiones, las familias dejan la llave de su piso en una agencia confiando en que lo alquilarán mientras ellos no estén. A veces, y siempre de forma aislada, algún trabajador de la agencia decide arrendar el apartamento de forma ilegal, engañando a propietarios e inquilinos.

Además, en caso de que el alquiler se haga de forma transparente, las normas se han endurecido desde hace unos meses. Según un decreto de la Generalitat, la estancia máxima de los ocupantes será de tres meses, y alquilar una vivienda por menos de ese periodo sin licencia podrá sancionarse con entre 30.000 y 90.000 euros. Más de tres meses se considerará alquiler de residencia habitual. Estas medidas se cambiaron para dar más garantías a usuarios, propietarios y vecinos; favorecer la transparencia de cara a la Administración y luchar contra el fraude fiscal.

Otras veces, actúan mafias, sobre todo de extranjeros, que logran entrar en la vivienda y cambian las cerraduras. Algunos se quedan dentro y otros las realquilan hasta el desahucio.