Sí, lo oyes decir con frecuencia. Pero ¿qué significa ser asertivo?

Significa expresar tus opiniones y emociones, así como defender tu punto de vista y tus necesidades con honestidad e integridad, sin temor a reacciones negativas de los demás y, al mismo tiempo, sin atacar o abusar de otra persona.

Muchas veces, atrapados por el enojo o la incapacidad para decir no, terminamos pensando no tenemos más opción que transigir y resignarnos o enfadarnos y crear una situación enojosa que quien sabe cómo terminará y si no acabará por volverse contra nosotros. La solución es la asertividad, pero ¿cómo llegamos a ser asertivos si no forma parte de nuestras cualidades naturales?

Proponemos cinco situaciones frecuentes de conflicto en nuestra vida laboral o personal, y cómo afrontarlas con asertividad:

1.- Con el jefe: estás en el trabajo y tu jefe te pide hacer algo en un periodo de tiempo tan corto que es casi imposible, y como si no se diese cuenta de la cantidad de trabajo que ya tienes que hacer. ¿Cómo ser asertiva? Explica a tu jefe que comprendes la necesidad de resolver el asunto rápidamente y que estás dispuesta a correr para hacerlo, pero hazle ver que, para cumplir con todas tus obligaciones pendientes necesitarás delegar parte de tu trabajo o de obtener un plazo más largo para entregar el resto.

2. Con tu pareja: cuando estáis decidiendo qué hacer el fin de semana y tu pareja lo que quiere es ir al cine a ver una película de terror que a ti no te apetece en absoluto. ¿Cómo salvar la situación con asertividad? Dile que las películas de miedo no son tus favoritas. No obstante, podéis ir a ver alguna cuando estés de humor para ello, cosa que no sucede este fin de semana. Proponle ir al cine pero a ver un género distinto.

3.- Con una amiga: acabas de volver del trabajo y estás exhausta. Te llama tu mejor amiga que está pletórica de energía y quiere salir. ¿Cuál sería la solución asertiva en este caso? Explícale que te encanta quedar con ella pero que esta vez tienes un cansancio infinito y que te resulta imposible salir ni aunque te venga a recoger con una cuchara. Para compensar proponnle algo divertido y que a ella le guste mucho hacer y fija ya en el momento una fecha cercana para hacerlo.

4.- Con tu madre: te llama por teléfono desconsolada quejándose de que no vas a verla nunca, aunque tú sabes que no es así. ¿Cómo afrontar la situación con asertividad? Escucha con calma la versión de tu madre y después dile que has comprendido: lo único que quiere es verte con más frecuencia, ¿no? O simplemente recuérdale, de manera simple pero sincera, que la quieres mucho. Y ya está.

5.- Con la colega pesada. Tu nueva compañera de trabajo de acaba de dar otro consejo (no pedido) sobre tu vida privada y no sabes cómo decirle que cierre la boca de una vez. Porque un consejo de vez en cuando, bueno, pero ¡cada media hora….!!!! Es difícil aguantarse pero conviene también ser asertivo ¿Cómo? Dile a tu colega que aprecias su interés por tu bienestar y que escuchas sus consejos pero que no necesitas que esté constantemente diciéndote lo que debes hacer.