Cooperación

Del Valle de Benasque al corazón de África Occidental

Juan Manuel Lamora es un ganadero de Sesué que no dudó en dejar el Valle de Benasque para acudir a la llamada de un amigo misionero.

Juan Manuel, enseñando a manejar el tractor
Del Valle de Benasque al corazón África
J. M. M.

Se lo pidió su amigo Rafa y no lo dudó ni un instante. Juan Manuel Lamora es un ganadero altoaragonés, de la localidad de Sesué, que pasó 20 días en la misión de Fô-Bouré, en Benín, enseñando a manejar un tractor a los habitantes del pequeño poblado en el que desempeña su labor Rafa. Juan Manuel le asesoró sobre la compra de este vehículo para el proyecto que Manos Unidas gestiona en el país africano.


A través de su blog, Juan Manuel ha narrado su experiencia y anima a colaborar (cta. bancaria: 0049-3578-18-2214092208) en un proyecto en el que se ha involucrado gracias a su amigo Rafael María Quiros, un misionero riojano que conoció en el Valle de Benasque y que, actualmente, desempeña su labor en Benín.


“Tiene que ser manual”, aconsejó el ganadero oscense. Y finalmente, la misión contó con un flamante tractor Massey Ferguson de color rojo para trabajar la tierra. Juan Manuel estuvo en contacto con la misión a través de internet hasta que al final deicidó viajar a África para formar 'in situ' a los futuros tractoristas.


El viaje hasta Fô-Bouré duró dos días y fue duro. Cuando llegó a la capital, Cotonú, Rafa le aguardaba con un todoterreno en el que tuvieron que recorrer 550 kilómetros por una pista de tierra hasta el lugar de destino. Desde su llegada, el blog de Juan Manuel da cuenta de sus impresiones con buen humor: "Cuando llegué a la misión se me había quedado el brazo agarrotado de tanto saludar, me sentí como el Papa". Pero el propósito de esta bitácora va más allá, y ha servido para mostrar y concienciar a todos sus amigos las duras condiciones de vida en Benín.


Durante la estancia en Benín, Juan Manuel pudo visitar el hospital infantil de Tanguieta, que gestiona Sor Cristina Fernández, una monja española procedente de la localidad madrileña de Pinto. Este es uno de los proyectos que financia a través de la Asociación R. A. F. A., cuyos fondos y donativos se dedican integramente a esta labor. De hecho, Juan Manuel acaba de donar 13.000 euros para este hospital, gracias a la recaudación conseguida el pasado verano durante la celebración de un festival en Benasque, además de lo obtenido con la venta de unos calendarios solidarios. El hospital es un centro de referencia en Benín, Burkina, Niger, Nigeria y Togo.


Durante su estancia en Benín, Juan Manuel pudo conocer en otras poblaciones cercanas los proyectos que desarrolla Manos Unidas en la zona: dispensarios de salud, escuelas, jardines deinfancia, centros para parturientas, pozos y acometidas de agua, fomento de cooperativas para mujeres, farolas con placas solares... y también tuvo la oportunidad de conocer a Cécile Samagui, que recogió el premio Príncipe de Asturias de la Concordia en 2010 en representanción de Manos Unidas, junto a Myriam G. Abrisqueta.


Uno de los momentos más emotivos fue, sin duda, cuando la presidenta de la cooperativa de huertos se ausentó para dar a luz a su cuarto hijo, al que puso de nombre Enmanuel. "Como no saben decir Juan Manuel, le pusieron ese nombre por mí". "Te acaban de conocer y al primer crío que nace le ponen tu nombre. Es emocionante", comenta el ganadero altoaragonés.


En la misión también conocíó a Juan Pablo y Luis Ángel, compañeros de Rafa en la misión de Fô Bouré. "Los tres están cambiando la calidad de vida de estas gentes", cuenta en su blog. Durante su estancia también coincidió con dos delegadas españolas de Manos Unidas, de visita para conocer los últimos proyectos en la misión.


Para Juan Manuel, este viaje supuso toda una experiencia, una aventura emocionante. Ha conocido de primera mano una país, un continente y una forma de vida completamente diferentes, donde ha constatado que a veces lo esencial se encuentra en la ausencia de lo material. "La nuestro solo es una crisis de valores. La de verdad está allí", explica este ganadero aragonés, que nada más llegar de su periplo africano (2 días de viaje) se fue a ver cómo estaba su ganado. Juan Manuel no descarta volver a Benín y afirma que seguirá colaborando con la misión de Fô-Bouré. Mientras, sigue con su faena en el Valle de Benasque.