La obra del escultor Félix J. Reyes, en una muestra retrospectiva en Zaragoza

Durante sesenta años de creación artística ha elaborado todas sus obras.

El escultor Félix J. Reyes, uno de los mayores representantes de la abstracción organicista española, expone desde este viernes en Zaragoza una veintena de obras, algunas integradas por varias figuras, que han sido elaboradas durante sus sesenta años de creación artística.


La exposición, titulada 'Vida: ausencia/presencia: reversibilidad' (fragmentos), muestra hasta el día 11 de enero de 2015 en el museo Pablo Gargallo piezas individuales y grupos escultóricos, elaboradas en madera, piedra, bronce e hierro, por Félix J. Reyes (Valleseco, Gran Canaria, 1941) a lo largo de su vida artística.


Es decir, desde la escultura costumbrista de sus comienzos en los años sesenta, cuando se encontraba en pleno periodo de formación, hasta su etapa más personal en la que empezó a formarse como escultor, ha señalado Reyes durante la presentación de la exposición. Ha explicado, asimismo, que sigue aprendiendo todavía y continúa con su evolución.


La muestra, con obras en su mayoría figurativa, ya sea en pequeño o gran formato, comienza con el retrato en bronce de su mujer, Rosa Castellot, de 1965; 'Abrazo eterno', en piedra ocre de Ulldecona, de 1997, y 'Juan', en madera de haya teñida e hierro, de 2009, en la que tuvo como modelo a su nieto Juan, entre otras.


También se pueden ver sus creaciones más recientes y actuales, como 'El camino', en hierro y madera, integrada por varias figuras humanas de tamaño reducido, y 'Las mujeres del mercado', en madera de haya, de tamaño natural, ambas realizadas este mismo año.


En el recorrido expositivo se puede ver, además un fragmento de otra instalación escultórica de dieciséis metros, compuesta de figuras humanas, también de tamaño reducido, que con el título de 'Solidaridad', es un homenaje a las víctimas del atentado del 11-M y al movimiento solidario.


Unas creaciones, que representan en su mayoría figuras humanas, y que destacan por el refinamiento de sus líneas, el predominio de los volúmenes sobre los detalles y, en algunos casos, una clara abstracción organicista.


Se trata, en definitiva, de una ocasión excepcional para conocer la obra de uno de los mayores representantes de la escultura riojana actual, ha señalado el jefe de servicio de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza, Rafael Ordóñez.


Félix J. Reyes cursó sus estudios artísticos en la Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid) y desde 1966 reside en Logroño, ciudad en la que ha desarrollado una dilatada, intensa y brillante trayectoria artística y docente.


En este último campo, en el de la enseñanza, destaca su paso por la Escuela de Arte de La Rioja de la que fue profesor, catedrático y director, hasta su jubilación.


En 2002, antes de su retiro, el Gobierno de La Rioja le otorgó la máxima distinción de la Comunidad en la categoría de Bellas Artes.

El trabajo escultórico de Félix J. Reyes sobresale por su gran presencia en espacios públicos urbanos, especialmente en su ciudad de residencia y en toda la Comunidad de La Rioja.