La Fiscalía italiana pide suspender un juicio a Berlusconi por estar "seriamente enfermo"
El magnate precisa de un período de "reposo absoluto" de "60 o 90 días" en una habitación medicalizada de su domicilio tras salir el sábado del hospital.
El estado de salud de Silvio Berlusconi resulta "preocupante". El cuatro veces primer ministro italiano, de 84 años de edad, se ha pasado los últimos meses entrando y saliendo de los hospitales desde que, el pasado septiembre, tuvo que ser ingresado en una clínica de Milán tras contagiarse de covid-19. Aunque consiguió superar la infección, el coronavirus le ha dejado muy debilitado al agravar algunas de las dolencias que ya tenía, como una patología inflamatoria crónica y los problemas cardíacos que le obligan a llevar un marcapasos desde hace años.
La última alarma sobre su salud saltó este miércoles cuando Tiziana Siciliano, fiscal adjunta del caso 'Ruby ter', que tiene al magnate como principal imputado por sobornar supuestamente a los testigos de un juicio anterior, afirmó que Berlusconi está "seriamente enfermo" al sufrir una "patología severa", según consta en los certificados médicos entregados al tribunal por la defensa. El abogado del ex Cavaliere, Federico Cecconi, había pedido que se desgajara a su defendido del resto de imputados en el proceso al necesitar éste de un período de "reposo absoluto" para recuperarse, que puede oscilar entre los "60 ó 90 días".
"Por supuesto que estamos preocupados", afirmó Cecconi, asegurando que el fundador de Forza Italia se encuentra "constantemente controlado en su casa" de Arcore, a las afueras de Milán, donde se ha instalado una habitación medicalizada para verificar su evolución, pues su estado de salud está "deteriorado". La fiscal confirmó que Berlusconi está "de verdad mal, con una situación de particular seriedad y gravedad", por lo que se mostró dispuesta a juzgar por separado a los otros imputados para que no tengan que seguir esperando a una mejoría del político. Será el juez responsable del caso el que decida definitivamente si es posible esta opción.
El magnate salió el pasado sábado del hospital San Raffale de Milán, donde había sido ingresado el martes anterior debido a una gastroenteritis y a algunos problemas inflamatorios aparentemente ligados a la covid, que superó en septiembre. En enero tuvo que ser hospitalizado de urgencia en una clínica del Principado de Mónaco y en abril se pasó 24 días en el San Raffaele. Su estado de salud no ha mejorado sustancialmente estas últimas semanas, pero su médico de confianza, Alberto Zangrillo, accedió finalmente a darle el alta el sábado con el compromiso de que se instalara una habitación medicalizada en su mansión de Arcore.
Los rumores cada vez más infaustos sobre la salud de Berlusconi obligaron a Antonio Tajani, coordinador nacional de Forza Italia, a asegurar hace unos días que su líder estaba "conmocionado ante tantas muestras de cariño" y que había "sonreído" ante las "noticias alarmistas". Tajani confirmó que el magnate iba a continuar un período de "reposo y rehabilitación" en su domicilio, como le habían prescrito los médicos.
