Turquía deporta a 1.500 ciudadanos que pretendían unirse al Estado Islámico

Se ha avisado de unos 12.500 nombres de personas a las que se ha prohibido la entrada.

Las autoridades turcas han detenido y deportado a unos 1.500 ciudadanos de países de la Unión Europea al detectar que tenían intención de unirse al grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Siria, ha informado este jueves el ministro turco de Asuntos Europeos, Volkan Bozkir.


"Hemos deportado a unos 1.500 ciudadanos de países de la Unión Europea que llegaron a Turquía para ir a unirse al Estado Islámico (en Siria)" explicó Bozkir en una conferencia de prensa celebrada este jueves en Ankara, momentos antes de partir a Bruselas, y recogida por la cadena CNNTürk.


Estos ciudadanos fueron detenidos gracias a que los servicios secretos de países europeos compartieron sus datos con los turcos, explicó.


"Para diferenciar quién es terrorista y quién turista normal entre los 39 millones de turistas que (cada año) llegan a Turquía hace falta compartir informaciones de los servicios secretos. En los últimos meses, esta petición nuestra ha tenido eco y nos han avisado de unos 12.500 nombres de personas a las que hemos prohibido la entrada en Turquía", abundó el ministro.


Los 1.500 deportados formaban parte de esta lista de sospechosos, aclaró.


"Turquía considera al EI una organización terrorista y de ninguna manera colabora con este grupo", recalcó, rechazando así las frecuentes quejas de la oposición, que acusa al Gobierno de ser permisivo con los yihadistas.


El martes pasado, la policía detuvo en Ankara a una británica de 22 años supuestamente en camino a Siria con la intención de unirse a los yihadistas.


La semana pasada, tres chicos, también británicos, dos de ellos menores de edad, fueron devueltos a Londres por el mismo procedimiento, pero en febrero, tres chicas de la misma ciudad eludieron su detección y llegaron a Siria a través de Turquía, según los medios británicos.