Trico justifica los 96 despidos en Airtex Zaragoza por la menor demanda de piezas que supondrá el vehículo eléctrico
El sector ve irracional llevar la producción a Rumanía en un momento en el que la empresa genera beneficios
Las bombas de agua y combustible para motores que fabrica Airtex (en primer equipo y para recambio) cada vez serán menos demandadas por el avance del vehículo eléctrico. Este es el argumento que esgrime el grupo estadounidense Trico (ahora llamado First Brands Group) para justificar el despido colectivo de 96 trabajadores en la planta que su filial Airtex tiene en Plaza.
La mayoría de las rescisiones de contrato afectarían a personal de Producción pero también de Finanzas, RR. HH. y de otros departamentos, según la memoria del ERE presentada el viernes.
Aunque en principio la compañía comunicó verbalmente a los sindicatos que habría 120 despidos, finalmente en la memoria se concreta que serán 96 de un total de plantilla de 132 en Airtex Zaragoza. Y que su trabajo lo realizarán a partir de 2024 empleados de la planta de Trico en Rumanía, suministradora de limpiaparabrisas.
La razón aportada por este grupo norteamericano en la memoria del ERE es que así corren menos riesgos al centralizar en una sola factoría, la de Rumanía, la producción de todos los componentes para automoción.
Amortiguan de esta forma, según Trico, las posibles pérdidas por el mayor peso que vaya ganando el coche eléctrico hasta 2035, cuando entra en vigor la normativa europea que prohíbe la fabricación de coches de combustión tradicional de gasolina y diésel. O incluso plazos más cortos como 2030, avanzado por Stellantis para tener toda su gama de vehículos electrificada.
Además, de acuerdo a la memoria del ERE, Trico pretende ahorrarse las mayores inversiones a realizar en la planta de Airtex para incorporar nuevas líneas destinadas al coche eléctrico.
Según fuentes de la representación de los trabajadores, la razón del despido colectivo no se sostiene. Es un futurible, critican, al entender que la compañía se pone la venda antes que la herida.
«Aducen que el 95% de la producción de Airtex es la bomba de combustible y que tienen que adaptarse a los nuevos productos que requerirá el coche eléctrico. Y por si no funciona esta tecnología, deciden no invertir en Zaragoza y llevarse la fabricación al centro de producción ‘Trico Wipers’ en Rumanía». Por tanto, explican los sindicatos, «quieren así minimizar riesgos» y en eso basan el ERE.
Tras leer la documentación aportada, advirtieron de la inexistencia de las causas productivas que plantea el grupo Trico para el ERE. «Solo las habría organizativas y obedecen a una decisión unilateral», indicaron.
Y recalcaron que tampoco las hay económicas, dado que Airtex registra crecimiento en beneficios los últimos años. «Es todo paja lo que alegan en la memoria del ERE», reconocieron, al no incluir datos económicos que sostengan la necesidad de este despido colectivo.
«No hay razones técnicas»
Desde la Federación de Empresarios del Metal de Zaragoza (FEMZ) y el Clúster de la Automoción en Aragón, ambos presididos por Benito Tesier, este ajuste no tiene ni pies ni cabeza.
«No existen razones ligadas a la actividad en Airtex que justifiquen esta forma de proceder», aseguró. Sin disponer aún de toda la documentación del ERE, «de lo transmitido por la parte sindical no parecen encontrarse razones técnicas que justifiquen la decisión de aplicar el ERE», recalcó. Por eso, dijo, «vamos a seguir buscando la racionalidad de esta medida», a la vez que pedirán a Trico «responsabilidad social» y que siente a la mesa de negociación a un directivo del grupo con capacidad de decisión.
«Es incomprensible que en esta transición hacia una movilidad sostenible, algunos grupos proveedores de automoción apuesten por invertir en I+D en Zaragoza y otros únicamente por ahorrar costes salariales cuando hay otras medidas menos drásticas que un despido colectivo en una empresa que además va bien», concluyó Tesier.
