Tariq reconoce que jugar contra el Depor motiva. Es lo que tiene enfrentarse a un equipo que no hace mucho ponía contra las cuerdas a los grandes. Cuando se le conocía por el Superdepor. El Alcoraz quiere vestirse de gala ante la visita de uno de los más serios candidatos para estar el próximo año en la mejor liga del mundo. Y el delantero es consciente de que el rival de este domingo impone por un fútbol rápido protagonizado por muchos jugadores con el sello de la Primera en sus botas.

Con Roberto en el dique seco, Tariq aparece como la principal referencia del ataque de los de Quique Hernández. Tiene hambre de goles el jugador. Reconoce que dos son muy pocos y menos cuando se comparan con los que firmó la temporada pasada. Una buena ocasión para desquitarse es contra un rival de campanillas. Aunque pronto posa sus palabras en el deseo de que salga un partido redondo. En su mente tiene uno: el que firmó el Huesca la pasada campaña contra el Rayo. «La verdad es que todos tenemos muchas ganas de jugar el partido. Sabemos que no estuvimos bien contra el Cartagena. Eso lo debemos de borrar para volver al camino de la victoria», indica el delantero.

El delantero subrayó que la derrota contra el Cartagena en la pasada jornada dolió por lo que el vestuario tiene ganas de resarcirse y de darle tres puntos a la afición ante un grande. Además, urge. Enero se presenta como un mes terrorífico por la entidad de los rivales. Ganar al Depor sería un tremendo espaldarazo al Huesca. Una dosis de confianza brutal para luego medirse al Hércules y al Barcelona B. La situación del Huesca en la tabla implique que tenga que sumar para salir de la zona baja, de los puestos que condenan al descenso. La derrota en Cartagena truncó la buena racha y este domingo se presenta como una nueva oportunidad para sacar la cabeza del pozo. «El equipo había conseguido unos buenos resultados y quizá el parón no nos sentó bien, pero eso nunca se sabrá. Lo importante es que somos el mismo equipo, y debemos de volver a tener buenos resultados -recalcó el jugador- con independencia del rival que tengamos delante, sea el Depor o el Madrid».

Y si para ganar hay que meter goles, los delanteros tienen esa misión como bandera. Tariq no lleva una temporada tan fina como esperaba, aunque quedan dos partidos de la primera vuelta y toda la segunda para resarcirse. El jugador no regateó la cuestión y aseveró que «vueltas le doy» a esa sequía. «El año pasado jugué 15 partidos y tuve la fortuna de meter ocho goles; y en esta temporada llevo incluso algún partido más y llevo dos goles. Tengo ganas de que me salga un partido redondo y ojalá sea este fin de semana».

El Huesca, que ayer volvió a iniciar el entrenamiento al mediodía debido a que los campos estaban duros por el frío, ha analizado al Depor. Un par de sesiones de vídeo han demostrado lo que los jugadores esperaban de un bloque con tanta calidad: «Un rival con un ritmo de juego impresionante», en palabras de Tariq. Contra ello, pelea por todos los balones y un equipo compacto para contrarrestar el tiralíneas que puede poner el Depor sobre el cuidado césped de El Alcoraz.