Golpe de autoridad

El CAI Teruel se examinaba ayer ante su afición, la misma que vio cómo el pasado sábado el conjunto de sus amores doblaba la rodilla ofreciendo una imagen nada propia de un campeón. El CAI Teruel precisaba recuperar el cariño de su público que ayer, pese al tremendo frío, no le volvió la espalda. Y el CAI Teruel dio un golpe de autoridad en la pista de Los Planos, con un contundente triunfo, en 68 minutos, en un plis-plas, ante un grupo de jugadores descarados que componen el Radnicki Kragujevac serbio.

El conjunto que conduce con mano firme Óscar Novillo se sacó la espina de las dos derrotas consecutivas (Roeselare y Murcia) con una victoria que le hace mantener vivas sus opciones de seguir en la 'Champions League'. El triunfo del Belchatow ante el Roeselare (3-0) provoca un triple empate que beneficia al CAI, que se coloca en un privilegiado segundo puesto del grupo B.

Si vital era este duelo contra el combinado serbio, el encuentro que enfrentará a ambos el día de Reyes en Kragujevac (en un viaje que promete) adquiere la misma dimensión, porque esta segunda plaza se la disputará contra los belgas del Roeselare, que visitarán la cancha turolense el 13 de enero.

El CAI necesitaba reconciliarse con su juego y con su hinchada. Las prestaciones del equipo aragonés habían bajado muchos enteros en el momento en que el balón salía de la mano y cuando se recibía. Saque y recepción van de la mano, como las parejas, y si uno falla el otro el otro lo lamenta. Ayer, el CAI se aplicó en brillar en estos dos fundamentos, y le salió redondo. El Kragujevac puso mucha voluntad: jóvenes con hambre de demostrar su brío en la pista dirigidos por un veterano (Ilic), que ayer no tuvo su día en la dirección, para disgusto de toda una institución en el voleibol serbio, Slobodan Kovac. Novillo vio en el calentamiento matinal cómo los receptores Suela y Vega se quedaban sin vestirse de corto. Pero el técnico tiene recursos en el equipo, y Juan Guerrero, en su puesto, se destapó.

El bloque que maneja Novillo está en fase de maduración; hay jugadores que tienen que explotar. Todo es cuestión de cabeza. Sorprende que Julián García-Torres, 'chupe' asiento y que ayer saltara en cuatro momentos puntuales. Novillo quiere responsabilidad, compromiso, trabajo. Guerrero le devolvió la confianza que depositó el técnico con todo un alarde de facultades. No fue el único. Rocamora tuvo su mejor estreno en la pista turolense y salió ovacionado. Como Torres y Harolo, tremendos en el bloqueo; Fran Rodríguez y Llenas, en tareas de recepción; Ibán Pérez, en el ataque, y Hernán, en el reparto del juego.