Movilla pide ayuda al Atlético de Madrid

El futbolista del Real Zaragoza, suspendido de empleo y sueldo durante un mes, quería entrenar con el club madrileño, pero Pitarch presionó al Atlético para que no le dejaran.

Movilla, en el entrenamiento del martes
Movilla estuvo observando el entrenamiento del martes

José María Movilla telefoneó a los altos dirigentes del Atlético de Madrid para estudiar la posibilidad de que pueda entrenarse con alguno de los equipos del club colchonero mientras dura el mes de suspensión de empleo y sueldo impuesto por García Pitarch. En el Atlético se le cerró la puerta de hacerlo con el primer equipo, pero sí se le dio luz verde a hacerlo con su filial. Finalmente, enterado del caso Pitarch, presionó al Atlético y Movilla no trabajará con los colchoneros.


El Pelado quiere entrenar con un equipo y así se lo hizo constar, más tarde, al Real Zaragoza en un burofax remitido a los despachos del club, advirtiendo que su intención no era permanecer inactivo durante un mes.

Un largo enfrentamiento

Movilla fue llamado el pasado martes a las oficinas de la SAD pasadas las 21.00 y allí, de manos del consejero y secretario general, Paco Checa, recibió un documento en el que se le comunicaba que queda suspendido de empleo y sueldo durante un mes, a contar desde el miércoles, 29 de enero (por lo tanto, hasta el 1 de marzo próximo).


Es la resolución que han adoptado los abogados externos -el despacho de Garrigues- que asisten en los últimos tiempos al Real Zaragoza, después de que Movilla hubiera estado 14 días suspendido solamente de empleo -no de sueldo-, sin poder entrenarse con el resto de la plantilla como consecuencia de unos mensajes vertidos en las redes sociales que la dirección general consideró ofensivos.