¿Cuándo llegó a El Cairo?En octubre de 2021. Por aquel entonces, estaba trabajando en empresa de consultoría en Madrid; me encantaba mi trabajo, pero quería buscar oportunidades fuera de España. A lo largo de mi vida, por circunstancias personales, he tenido la suerte de viajar mucho y de vivir en diferentes países como Holanda o Italia. Creí que era el momento ideal para explorar, estar una temporada fuera y coger experiencia en el extranjero. Es cierto que nunca pensé en Egipto como primera opción, que contemplaba más algunos países europeos; sin embargo, encontré un puesto que se ajustaba a mi rol en El Cairo, y decidí iniciar una nueva etapa laboral.

¿Cómo es vivir allí?Genial. La gente en Egipto es muy acogedora, y es un país con muy buena gastronomía y mucha cultura. En mi caso, el único contratiepo es estar lejos de casa, lejos de mi familia.

¿Cómo surgió su incorporación a La Liga?A lo largo de estos dos años, pude conocer a mis antecesores en el puesto de delegado de La Liga en Egipto, y pude ver de cerca su trabajo y asistir a algunos eventos que realizaban en El Cairo. Un día me comentaron que se iba a quedar vacante el puesto, ya que el antiguo delegado se mudaba a otro destino, y entonces me presenté. No me costó dar el paso.

¿Por qué?Porque era un proyecto muy interesante. Hablamos de una empresa española de fútbol y entretenimiento, que tenía presencia en Egipto y con un nombre como La Liga; no lo dudé ni un instante, ya que, además, en mi casa el deporte y el fútbol siempre han estado muy presentes.

¿Cómo fue el proceso de selección?Exhaustivo (sonríe). Superé cuatro fases, donde se valoraban diferentes aspectos en el perfil como la experiencia de negocio en el país, el conocimiento sobre los diferentes socios potenciales o el manejo de los medios de comunicación o el márquetin. Respecto a los candidados, yo no fui consciente del número; simplemente, estoy contenta por haber sido seleccionada y ahora tengo la fortuna de trabajar en algo que me apasiona.

¿Cuántos delegados de La Liga hay distribuidos por el mundo?Actualmente somos 44 delegados, que cubrimos 90 países diferentes. Estamos organizados por regiones. En mi caso pertenezco a la región MENA (Middle East and North Africa), encabezada por Marco de Santis, que gestiona a siete delegados y 19 países.

¿Cómo trabajan?La región de MENA nos apoyamos mucho en la oficina de Dubai, dirigida por Maite Ventura, que nos da soporte en las diferentes verticales del proyecto. Las regiones están lideradas por Octavi Anoro, director y responsable del proyecto internacional de La Liga. Cada país se focaliza y realiza las actividades que mejor y más impacto tienen en su región, siempre ciñéndonos a la estrategia global y estando alineados con los ‘headquarters’ (cuartel general).

¿Cuáles son sus funciones?El objetivo principal del proyecto es construir una marca reconocida en la región y acercar esta marca a los aficionados. Para ello, es importante realizar un análisis, empaparnos del mercado local, saber cómo se encuentra económicamente, cuál es su situación futbolística, hacia qué dirección se están moviendo a nivel tecnológico y cuáles son las principales oportunidades con socios y accionistas. A su vez, tenemos que cuidar a nuestros socios actuales, mantener una relación estrecha para poder seguir construyendo juntos.

¿Qué herramientas utilizan?Contamos con diferentes herramientas. Intentamos mantenernos activos y estar presentes en el mercado, ya sea a nivel digital o a través de eventos físicos como ‘watchparties’, torneos, actividades con colegios o universidades. También contamos con una pata muy importante dentro de nuestra marca, que es la parte educacional. Queremos realizar nuevos proyectos en la región como parte de La Liga Business School, donde tenemos la oportunidad de transmitir nuestro conocimiento alrededor del mundo.

La Liga se ha instalado en países con gran tradición futbolística, como Italia y Argentina, pero también en otros donde el fútbol tiene menor calado. ¿Cuál es el impacto en Egipto?Desde La Liga analizamos diferentes indicadores como, por ejemplo, la competencia, las audiencias, el valor de derechos de televisión o los seguidores en redes sociales. En el caso de Egipto, en la comunidad árabe se posiciona como el cuarto país con más seguidores de La Liga en redes sociales, con un 4,72%, por detrás de India, Bangladesh e Indonesia. Esto es un indicador muy significativo, que permite entender la gran cultura y el seguimiento futbolístico que tiene un país como Egipto, y nos anima a seguir construyendo nuestra marca en la región.

¿Cómo se vivió allí el Clásico entre Barcelona y Real Madrid?En Egipto hay una gran pasión por la Liga española. Y, evidentemente, existe un entusiasmo especial con el Real Madrid y el Barcelona, los dos equipos más seguidos del mundo en las redes sociales. Por todo ello, el Clásico es uno de los encuentros más atractivos no sólo en Egipto, sino en el mundo entero. Un partido de esas características despierta grandes pasiones, y todavía más cuando emergen nuevos ídolos como Jude Bellingham, que está teniendo un impacto sobresaliente en su primera temporada en el fútbol español. Aquí tenemos unas peñas muy arraigadas por parte del Real Madrid y el Barcelona. Cuando tenemos la oportunidad de organizar eventos presenciales, sus peñistas no dudan en asistir y en apoyar a sus equipos. Y siempre, además, con un gran ambiente.

Es muy importante preservar los valores del deporte.Sin duda. Y la Liga, precisamente, está muy sensibilizada en la limpieza del fútbol. Luchar contra el amaño de partidos y contra la violencia son dos de nuestras prioridades. Más de 700 iniciativas y proyectos han sido llevados a cabo por La Liga y los clubes españoles desde la temporada 15-16 para erradicar la violencia y el racismo, tanto dentro como fuera de los terrenos de juego. El objetivo de todos ellos no es otro que fomentar una sociedad inclusiva y tolerante desde la base, gracias a la educación, la prevención y la actuación. Precisamente estos tres son los pilares de La Liga VS, el proyecto de La Liga y los clubes que busca inspirar y sensibilizar a los aficionados a través de los valores del fútbol para, todos juntos, lograr construir una sociedad libre de odio.

¿En qué consiste La Liga VS?Nace con una doble misión: dar altavoz a la labor que La Liga y los clubes llevan a cabo de forma continuada desde hace más de ocho años para lograr una sociedad más tolerante; y servir como motor para la creación de nuevas iniciativas que ayuden a acabar con la violencia en la sociedad, tanto en el seno de los clubes como de la mano de otras instituciones y ligas, como la Asobal o la Liga Nacional de Fútbol Sala, y con colectivos como Aficiones Unidas.