A pesar de haber cometido un atraco en el que se hicieron con un botín tasado en 10.000 euros, Cristian L. A. y Hugo V. O. no cumplirán entre rejas la pena a la que fueron condenados este jueves en Zaragoza. La Fiscalía solicitaba para ellos cuatro años de cárcel por un  delito de robo con violencia y uso de instrumento peligroso. Sin embargo, se alcanzó una conformidad entre las partes que reduce el castigo a dos años de privación de libertad porque los acusados han pagado a la víctima parte importante del valor de los objetos que le sustrajeron.

En la tarde del 27 de septiembre del año pasado, Cristian L. A. y Hugo V. O. abordaron al perjudicado cogiéndolo del pelo por detrás y empujándolo cuando iba a entrar en el portal de su casa en la calle de Matías Pastor Sancho en el Picarral. Acto seguido, lo intimidaron con una pistola de aire comprimido y le dijeron que estuviese quieto o que de lo contrario lo matarían.

De este modo, le quitaron una bandolera, en la que portaba 70 euros en efectivo dentro de la cartera y su documentación. También consiguieron un cordón y una cadena de oro que llevaba al cuello, un reloj y las llaves de su vehículo.

Posteriormente, en el lugar de los hechos fue localizada la pistola con la que los ahora condenados perpetraron el robo. A la espera de que se celebrase el juicio, Cristian L. A., que ha sido defendido por el abogado Alejandro Sarasa, y Hugo V. O. se encontraban en prisión provisional desde el 13 de enero y ahora quedarán libres al no superar la pena dos años y haberse acordado la suspensión de la misma.