Animales
Las tortugas de Florida o las iguanas exóticas no son regalos de Navidad
El Ayuntamiento de Zaragoza ha lanzado, coincidiendo con las fechas navideñas, la campaña 'Un animal no es un juguete' centrada este año en los animales exóticos para sensibilizar a la población a la hora de adquirir una mascota y promueve la adopción frente a la compra.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha lanzado, coincidiendo con las fechas navideñas, la campaña 'Un animal no es un juguete' centrada este año en los animales exóticos, ya que la suelta habitual de algunos animales como las tortugas de Florida en los ríos Ebro o Gállego afecta de manera negativa a la biodiversidad autóctona.
Durante la presentación de la campaña, el consejero de Participación y Relación con los Ciudadanos del Consistorio zaragozano, Javier Rodrigo, ha expresado que esta iniciativa pretende sensibilizar a la población a la hora de adquirir una mascota y promueve la adopción frente a la compra.
En esta línea, el director técnico del Acuario de Zaragoza, Javier González, ha agregado que esta campaña tiene como fin tanto el bienestar de los animales como el de los propios ciudadanos que se los pueden encontrar en la vía pública, y en algunos casos pueden ser "potencialmente peligrosos" o "vectores de enfermedades".
El Ayuntamiento y el Acuario de la capital aragonesa firmaron un acuerdo para que este se encargue de albergar en sus instalaciones a reptiles y anfibios exóticos que son hallados en la ciudad mientras el Centro Municipal de Protección Animal (CMPA) gestiona su futura adopción.
En total cada año llegan al acuario cerca de 125 tortugas abandonadas por sus dueños, ya que según ha recordado González hay que pensar bien la decisión de adquirir este animal que tiene una esperanza de vida que puede alcanzar los treinta años.
La tortuga de Florida es una especie que se adquiere fácilmente y por poco dinero, es "una compra casi compulsiva", y cuando empieza a crecer de tamaño con el paso del tiempo, los padres y sus hijos no se comprometen y las liberan en el río Ebro, ha expresado González.
Este comportamiento es negativo tanto para el animal que suele morir, como para el ecosistema. En el caso de estas tortugas, que son especies invasoras, desplazan a los galápagos europeos.
La aparición de especies exóticas invasoras es la tercera causa de pérdida de biodiversidad del planeta, tras el tráfico ilegal de especies y la destrucción de hábitats, ha recordado González, quien ha apelado a la sociedad a que sea consciente y responsable porque "los animales no son juguetes".
En estos momentos, el acuario zaragozano acoge también otro tipo de animales encontrados en la ciudad, como una serpiente pitón o boa constrictor, o un lagarto calote que llegó al Aeropuerto de Zaragoza en un avión de mercancías procedente de la India.
Este acuerdo ofrece además una alternativa sostenible a aquellos propietarios que quieran entregar a sus mascotas, evitando así que estas acaben en otros lugares.
