zaragoza
Acusan a un sexagenario de abusar de la hija de 9 años de una amiga
El hombre, marido de una amiga de la madre, invitaba presuntamente a la menor a bañarse en la piscina de su casa.
La ausencia de una niña de 10 años obligó ayer a aplazar un juicio por los presuntos abusos sexuales que habría sufrido a manos de un conocido de la familia de 61 años. La menor no había sido citada y su testimonio había sido recogido durante la fase de instrucción, pero la defensa entendió momentos antes de la celebración de la vista que la declaración de la niña era necesaria. La letrada que representa a la acusación particular, Claudia Melguizo, aseveró que la pequeña «no ha incurrido en contradicción» en ningún momento del proceso y que «la prueba preconstituida habitual se ha practicado con todas las garantías».
Los hechos por los que se enjuicia al sexagenario habrían ocurrido en agosto de 2020. El hombre, marido de una amiga de la madre, invitaba presuntamente a la menor a bañarse en la piscina de su casa, en Cadrete, donde también acudían sus nietos, con los que la pequeña trabó amistad.
Fue en ese contexto aparentemente seguro para la niña en el que el acusado habría abusado de ella al someterle a supuestos tocamientos de sus partes íntimas. Estos abusos le provocaron, según el parte médico de lesiones, daños «en el clítoris y en los labios menores».
Hasta ayer, fecha en que estaba señalado el juicio por la Sección Tercera, ninguna de las partes ni el Ministerio Público habían pedido la exploración, como se conoce la declaración de un menor como testigo en juicio oral. Tras el cambio de parecer del tribunal, la niña, que ahora tiene diez años, se verá obligada a declarar en la sala, tras un biombo que proteja su intimidad.
El encausado se enfrenta por el delito de abusos sexuales que se le imputa a penas de entre cuatro años –como pide el Ministerio Fiscal– a los cinco años que solicita la madre de la niña, personada en el caso como acusación particular y que ayer sí acudió a sede judicial.
