Anulan el juicio de la Operación Fonte-Kaiser tras el acuerdo de la Fiscalía con los 16 imputados

El Ministerio Fiscal ha alcanzado un acuerdo con los 16 acusados por tráfico de drogas en la Operación Fonte-Kaiser, desarrollada en la provincia de Teruel, por lo que no se ha celebrado este miércoles el juicio en la Audiencia. La Fiscalía ha modificado su escrito de acusación y reducirá las penas por arrepentimiento.

Los implicados habían sido procesados por tráfico de drogas, pertenencia a organización criminal y blanqueo de capitales. Las detenciones tuvieron lugar la pasada primavera.

En la operación, desarrollada de forma conjunta por la Guardia Civil y la Policía Nacional, los agentes se incautaron de 5,6 kilos de cocaína, que hubiesen alcanzado en el mercado negro en torno a 300.000 euros, según fuentes del instituto armado. A esto se suman 15.800 euros en metálico, además de móviles y cuatro vehículos.

La banda organizada traía la droga camuflada en botes de champú procedentes de Colombia. En Teruel era procesada en un laboratorio clandestino para venderlas luego al menudeo. La red, en la que hay ciudadanos colombianos, españoles y marroquíes, funcionaba como una empresa.

Tenían un horario fijo y unos teléfonos exclusivos para la venta, a través de los cuáles los consumidores encargaban la droga, y el grupo no solo vendía pequeñas dosis de uno o dos gramos directamente, sino que también realizaba labores de suministro y venta de mayores cantidades de droga, de 10 a 20 gramos, a otras personas que a su vez la distribuían en distintas localidades de la provincia, según las mismas fuentes.

La Fiscalía solicitó, en un principio, un total de 128 años de prisión, con penas que van desde los 14 a los 4 años según su implicación, y multas que sumaban 860.000 euros.

Sin embargo, el fiscal ha presentado una modificación en su escrito de acusación que reduce las penas establecidas, fruto del acuerdo al que se ha llegado hoy. Así, aquellos para los que se pedía hasta 14 años, en estos momentos podrían ver reducida su pena hasta en 10 años menos. De hecho, alguno de los imputados podría no volver a ingresar en prisión.

El motivo, según el fiscal, es que los acusados han mostrado "su arrepentimiento". Además, en el caso de uno de ellos, se ha demostrado que es "consumidor habitual de sustancias". La modificación de las penas, solicitada en el escrito del ministerio público, se incluye reducciones importantes, quedando algunas de ellas en seis meses, de manera que algunos de los acusados ya no entrarán en prisión.

Otras penas que incluyen el ingreso se alargan hasta casi cuatro años. Todas las penas van acompañadas de multas de hasta 20.000 euros y el impago conlleva el arresto.