patrimonio
Un historiador da con el posible autor de la misteriosa Última Cena de Alcañiz
El cuadro se ubicaría inicialmente en el retablo de la capilla del Sacramento, en la antigua iglesia gótica.
El lienzo de la Última Cena, que el alcañizano Jesús Ponz Zapater halló hace ocho años en la capilla de la Soledad de la iglesia Santa María la Mayor de Alcañiz podría fecharse en 1650 y ser obra de Francisco de Miedes, un artista del que apenas puede encontrarse información. La pintura destaca por la singularidad de su composición en vertical, frente a la horizontalidad que predomina de forma abrumadora en este motivo pictórico.
Ponz le había mostrado el lienzo al historiador Jorge Martín Marco, que empezó a “atar cabos” y a elaborar una hipótesis. Martín ha realizado una tesis sobre arquitectura aragonesa que tiene previsto publicar en los próximos meses. A él y a su equipo “Traza Grupo de Investigación del Arte Medieval y Moderno en Aragón” les han concedido el “Premio Extraordinario de Doctorado por la Universidad de Zaragoza”.
Para su trabajo recabó numerosa documentación sobre la iglesia de Alcañiz.
Martín indica que Francisco de Miedes formaba parte de la Cofradía de San José de Alcañiz, que abarcaba a diferentes gremios, como arquitectos, escultores y pintores.
En el año 1650, explica el historiador, se terminó de construir la capilla del Santísimo Sacramento, ubicada en la iglesia gótica de Santa María la Mayor -precedente del templo actual- y también se terminó de realizar su retablo. En el documento que se elaboró para la creación del retablo, se indicaban los espacios que debían dejarse vacíos para albergar pinturas y se concretaba que la iconografía debía de ser eucarística, como es el caso de la Última Cena, que es muy posible que se ubicase en esta capilla.
Para Jorge Martín, este lienzo, que “completa el patrimonio pictórico barroco de Alcañiz, el que se conservan pocos retablos”, recuerda al del “retablo mayor de la iglesia del Patriarca de Valencia y es muy parecido, con el mismo formato vertical, a otro conservado en Morella”, de Jerónimo Jacinto de Espinosa. En estas tres obras aparece el Santo Cáliz sobre la mesa, como ya reveló Jesús Ponz Zapater, el alcañizano que lleva reivindicando la restauración del lienzo desde que se topó con él.
Recientemente, también a raíz de la publicación del hallazgo de esta obra, el concejal de Patrimonio del Ayuntamiento de Alcañiz, Carlos Adreu, anunció que se creará un proyecto de micromecenazgo colectivo para que sean los propios vecinos los que financien la restauración de la obra. El coste estimado de su restauración es de 9.000 euros, presupuestado el Centro de Restauración Santa María de Albarracín.
Actualmente, el lienzo permanece en el mismo lugar que Ponz lo encontró, oculto al público.
