SANEAMIENTO

Medio Ambiente adjudica la última de las cuatro zonas del plan de depuración del Pirineo

Con las actuaciones en los ríos Cinca y Ara ya se han lanzado las 296 obras necesarias para sanear el cien por cien de las aguas residuales.

El Departamento de Medio Ambiente de la DGA acaba de lanzar la última de las cuatro zonas del plan para conseguir que todos los núcleos habitados del Pirineo depuren el cien por cien de sus aguas residuales. La consejería que dirige Alfredo Boné ha adjudicado la construcción y la explotación durante 25 años de las 102 actuaciones planeadas en los valles de los ríos Cinca y Ara, por lo que ya está en marcha la tramitación de los 296 proyectos previstos en total.

Según explicó el director del Instituto Aragonés del Agua, Rafael Izquierdo, esas 102 obras de depuración que aún estaban pendientes serán ejecutadas por la unión temporal de empresas (UTE) formada por Acsa S. A. y Vialex S. A. El presupuesto de adjudicación supera los 88,7 millones de euros, y está previsto que las primeras actuaciones estén terminadas a finales de 2011.

"Al igual que en el resto de zonas del plan Pirineo, el plazo de ejecución es de 24 meses: 6 para la redacción del proyecto y 18 para la construcción de las instalaciones -concretó Izquierdo-. No obstante, vamos a intentar acelerar las depuradoras de los municipios más importantes, como Aínsa o Boltaña. En cualquier caso, todas deberían estar acabadas en la primera mitad de 2012".

En teoría, para entonces ya tendrán que haberse puesto en servicio las actuaciones de las otras tres zonas en las que se ha dividido el plan -la del Aragón, la del Gállego y la del Ésera y el Noguera Ribagorzana-.

Esos plazos contrastan con el bloqueo que sufrió durante 14 años la depuración en los ríos pirenaicos. A pesar de que las obras fueron declaradas de interés general en 1993, durante todo ese tiempo el Ministerio de Medio Ambiente solo construyó la depuradora de Jaca y la de Sabiñánigo.

Esta situación cambió en el verano de 2007, cuando la DGA logró que la ex ministra Cristina Narbona cediera a Aragón la ejecución de todas las obras pendientes. Además, como Europa obliga a tratar el cien por cien de las aguas residuales para el 2015, el acuerdo de financiación con el Estado incluyó todos los demás municipios de la Comunidad: los del Pirineo no contemplados por el Ministerio y los de otras zonas que habían quedado fuera del primer plan especial de depuración. En total, el Ministerio se comprometió a aportar más de 340 millones en ocho años.

El convenio entre los ejecutivos central y autonómico se firmó hace dos años. Para entonces, el Departamento de Medio Ambiente ya había lanzado la tramitación administrativa y ambiental de las 296 obras previstas, lo que le permitió sacarlas a concurso en diciembre de 2008.

Tres de las cuatro zonas -194 actuaciones- se adjudicaron en septiembre del año pasado, pero la cuarta quedó desierta. El Instituto Aragonés del Agua abrió entonces un procedimiento negociado con publicidad en el que invitó a presentar ofertas a todas las empresas que habían optado a alguna de las licitaciones. Según Izquierdo, se recibieron cuatro propuestas, y la más ventajosa ha sido la de Acsa S. A. y Vialex S. A.