La decisión tomada el miércoles por el Departamento de Pirineos Atlánticos de cerrar hasta el próximo 15 de julio el paso del Portalet para los camiones de más de doce toneladas siguió ayer generando polémica y malestar en Aragón. Esta medida agrava la situación del transporte de mercancías por carretera desde Aragón a Francia, ya que los camiones tampoco pueden circular en este momento por el Somport (por obras), por lo que los dos pasos principales de comunicación con el país vecino están bloqueados.

Las comarcas de la Jacetania y el Alto Gállego están preocupadas por esta situación. El cierre de esta frontera a los vehículos pesados "no es una buena noticia", aseguró ayer el presidente del Alto Gállego, Pedro Grasa, quien añadió que esta medida se une al corte de la carretera francesa del Somport, que "afecta de una manera muy negativa a la comarca".

Grasa recordó que aunque el tráfico de camiones no es tan constante e importante en el Portalet como por el paso del Somport, "hay muchas empresas, sobre todo de Sabiñánigo, que viven del transporte con Francia y utilizan esta carretera diariamente". Además, en opinión de Grasa, los motivos del corte de esta frontera no están todavía claros: "Puede deberse a un problema con el firme y si es así, los técnicos deberán dar una explicación correcta y coherente".

Otra de las razones que se aducen son las molestias que representan el paso de vehículos pesados por la localidad de Laruns, tal y como explicó el presidente de la Jacetania, José María Abarca. Esta nueva medida adoptada por parte de los franceses "produce un roto considerable en el transporte de mercancías", dijo.

Unanimidad en el malestar

En cuanto a la postura mantenida por la DGA, ayer se insistió en lo dicho el miércoles. Fuentes del Gobierno autonómico reiteraron que se han pedido medidas alternativas para resolver el bloqueo de los pasos fronterizos y se aseguró que se mantenían contactos para tratar de encontrar una solución. El consejero de Agricultura y Medio Ambiente, Modesto Lobón, destacó que "la comunicación es fundamental en todos los ámbitos" y resaltó que, sin perjuicio de los problemas que sufren en Francia y que deben ser atendibles, se debe intentar, "que estos sean compatibles con la comunicación". Las declaraciones las hizo durante su visita a la romería del Viñedo (en Sasa del Abadiado, Huesca).

En cuanto a los partidos políticos con representación en las Cortes la unanimidad fue total. A la hora de valorar las causas y las consecuencias del bloqueo en que se encuentran las comunicaciones transfronterizas con Francia no se notó el color político: todos los partidos aragoneses criticaron con dureza la desidia y el desinterés que muestra el país vecino.

El portavoz del PP en las Cortes, Antonio Torres (que asistió también a la romería del Viñedo) denunció el abandono de los pasos fronterizos que unen Aragón con Francia. "Hay decisiones que resultan verdaderamente incomprensibles", afirmó tajante. "No solo el cierre en el día de hoy -dijo Torres-, sino también porque durante meses y años no se ha hecho el debido mantenimiento de esas carreteras y pasos fronterizos". Para el diputado del PP, el cierre de las fronteras de Somport y de Portalet durante estos meses para vehículos pesados no es un retraso de 30 años, sino que se asemeja a volver "al siglo XIX, cuando durante muchos meses al año (por el clima) el Pirineo era una frontera. Y eso no tiene ningún sentido en el contexto actual y de la Unión Europea".

Con igual dureza se pronunció Antonio Ruspira, diputado del PAR, quien calificó de "insostenible", "deplorable", "inaceptable" e "indignante" la situación de los pasos fronterizos por el Pirineo central. En opinión de Ruspira, lo ocurrido con el Portalet pone de manifiesto el nulo interés de Francia por mantener las comunicaciones por carretera con Aragón. "Hace tiempo que apostaron -explicó- por las conexiones con el País Vasco y Cataluña; Aragón no es su prioridad, por eso las infraestructuras que mantienen en el lado francés, las vías que encuentras tras atravesar el Somport y el Portalet, son decimonónicas".

Miguel Aso, diputado de IU, lamentó sobre todo la improvisación que se ha visto en este asunto y dijo que era "extraño" que desde España se pidan ahora medidas alternativas (al cierre de ambos pasos transfronterizos) cuando el problema ya se ha generado. "Demuestra -dijo Aso- que las conversaciones entre España y Francia no son muy fluidas. No hay coordinación ente ambos países, ni con Aragón".

Aso coincidió con Ángela Labordeta, candidata por CHA a las elecciones europeas, en la defensa del Canfranc como alternativa al transporte de mercancías por carretera. Labordeta recordó que, a corto plazo, debe atenderse el actual problema, "pero hay una solución viable para 2020 que permita el paso de mercancías de manera eficaz y sostenible: el ferrocarril del Canfranc".