Las estaciones de esquí se preparan para volver a recibir nieve un mes después

La Aemet anuncia la llegada de una borrasca que traerá precipitaciones generalizadas y viento intenso a partir del jueves. La cota de nieve estará en torno a los 1.800-2.000 metros.

Una máquina transportando de noche nieve de fuera de pistas a la zona de La Tuca en Candanchú.
Una máquina transportando de noche nieve de fuera de pistas a la zona de La Tuca en Candanchú.
Candanchú

Un mes después de las últimas nevadas que cayeron en el Pirineo aragonés, allá por el 8 de enero las estaciones de esquí se preparan por fin para nuevas precipitaciones esta semana en forma de nieve que vengan a aliviar la delicada situación por la que están atravesando este invierno.

Entre los cinco centros invernales de la provincia de Huesca suman actualmente 98 kilómetros esquiables: 32 en Astún-Candanchú, 40 en Formigal-Panticosa y 26 en Cerler. Los espesores oscilan entre los 15 y los 50 cm.

Todas ellas están ‘mimando’ al máximo la nieve para poder ofrecer las mejores condiciones posibles. En Candanchú, por ejemplo, las máquinas están recogiendo nieve de fuera de pistas para transportarla por las noches a las pistas que están abiertas. Gracias a ese trabajo, consiguen que se pueda seguir esquiando desde la zona de la Tuca hasta la parte baja de la estación a 1.500 metros.

En los refugios de montaña, por ejemplo, la situación no es mejor ni mucho menos. De todos los que hay en el Pirineo, solo Cap de Llauset, La Renclusa y Respomuso cuenta con nieve en los alrededores. Mientras, Ángel Orús, Casa de Piedra, Estós, Góriz, Lizara y Bachimaña tienen 0 cm.

La Agencia Estatal de Meteorología anuncia a partir del jueves una borrasca procedente del Atlántico que cruzará la Península y Baleares dejando un episodio de viento intenso y lluvias generalizadas con una cota de nieve en torno a las 1.800-2000 metros. Los siguientes días se espera que continúen y, además, las temperaturas también se desplomarán con lo que se esperan que las nevadas se prolonguen. 

Las previsiones de la Aemet para este mes de febrero parecen a priori más favorables que las de enero ya que, según la Aemet, serán húmedo o muy húmedo. Hoy por hoy, la superficie nevada medida por satélite en los Pirineos es la más baja de este siglo.

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