Fraga incorpora la escena completa del Calvario a la procesión del Silencio
El paso, sobre una peana con ruedas, estaba preparado para la Semana Santa de 2020, suspendida por la covid. El año anterior se había incorporado el del Santo Sepulcro, que salió a hombros de agentes de la Guardia Civil.
La procesión del Silencio de Fraga incorporará un nuevo paso, el Calvario, compuesto por las imágenes del Cristo Crucificado, la Virgen María y San Juan. Hasta ahora, solo salía el Cristo Crucificado. La escena hará el recorrido sobre una peana con ruedas, que ya estaba preparada en 2020. No obstante, la crisis sanitaria obligó a retrasar su salida. Su estreno tendrá lugar hoy a las 20.00.
El nuevo paso es fruto del "empuje" y "ganas" de varios feligreses, según explica uno de los integrantes del grupo parroquial, Jordi Chimeno, que se muestra "orgulloso" de la positiva evolución de la procesión. De hecho, tras su recuperación en 2015, 40 años después de su desaparición, no ha parado de crecer. En su última salida, justo antes de la crisis sanitaria, ya incorporó otro paso, el Santo Sepulcro, que fue sacado a hombros por un grupo de agentes de la Guardia Civil. También este año aparecerá de la misma manera. Los agentes avanzarán unos metros y después, tal y como se hacía antiguamente, serán relevados, con el fin de pasar a custodiar el resto de pasos. En total, habrá cinco: el Calvario, el Santo Sepulcro, el Ecce Homo, el Nazareno y la Dolorosa.
Al estreno del nuevo paso, se unirán otras novedades. Por primera vez, y como ocurría antaño, algunos de los grupos participantes estrenarán túnicas y medallones. En este último caso, lucirán la imagen de un detalle del retablo, una tiara papal, que han decidido rodear con una corona de espinas. En total, la procesión sumará la implicación de más de un centenar de personas. Los jóvenes que acaban de recibir el sacramento de la Confirmación llevarán el Ecce Homo y los integrantes de la cofradía de San Antonio Abad acompañarán al Nazareno.
Por su parte, portando la imagen de la Virgen, estarán las componentes de la Hermandad de la Dolorosa. "Hay una gran colaboración. La gente se ha volcado. Hay personas que han elaborado las túnicas, que han limpiado y arreglado las imágenes, que han participado en la iluminación… estamos muy agradecidos", señala Chimeno.
La procesión comenzará en la iglesia de San Pedro y el recorrido volverá a ser el mismo que se seguía antes de su desaparición, aunque con ligeros cambios debido a las obras de recuperación del pozo de hielo situado junto a la plaza de España. En concreto, costaleros, feligreses y acompañantes atravesarán la calle San José de Calasanz y después, bajarán por la calle Barranco, alcanzando la avenida Reyes Católicos. Desde allí, subirán al Paseo Segoñé, rodearán las obras, y finalmente, a través de la calle Mayor, volverán a la plaza de San Pedro.
El acto volverá a contar con la participación de la banda municipal de música. Además, y durante la misma jornada, tendrá lugar a las 8.30 el rezo del Vía Crucis, desde la iglesia de San Pedro y hasta el Castillo. Para Chimeno, las novedades de este año son un síntoma claro de la recuperación de la procesión, que, en su opinión, seguirá creciendo "gracias a la unión de tradición y devoción".
