Nadie sabe cuándo será proclamada candidata del PSOE Aragón, ni cuándo desembarcará Eva Almunia en la Comunidad aragonesa, ni si lo hará en condición de consejera de la DGA o de qué. "La decisión está solo en la cabeza de Iglesias", aseguran fuentes próximas al presidente y secretario general de los socialistas aragoneses. Y mientras, en el seno del partido, crecen -conforme se acerca la cita electoral de 2011- las elucubraciones y la rumorología. Pero también la inquietud, por si su llegada acarrea el desplazamiento de algún consejero de su puesto.

De momento, solo está claro que hasta el 30 de junio de este año no debería haber ningún movimiento. José Luis Rodríguez Zapatero ha dado orden de no hacer ningún cambio hasta que no concluya la Presidencia europea. Ha habido ya una excepción, Andalucía, pero se ha debido al caos interno de la organización tras la marcha de Manuel Chaves, algo que no ocurre en Aragón.

Pero ahora mismo, ni siquiera la fecha de verano parece probable para que comience el proceso de sucesión. La difícil coyuntura nacional y sobre todo la incertidumbre de lo que ocurrirá posponen la designación de Almunia posiblemente hasta otoño. En el ambiente, también se contempla la posibilidad de la convocatoria de unas elecciones anticipadas en el país, que trastocaría todos los planes.

"No hay ninguna urgencia porque se correrían riesgos innecesarios", justifican fuentes próximas a Iglesias. Ahora Almunia goza de una imagen sin fisuras. Como secretaria de Estado de Educación no sufre ningún desgaste, al contrario. Su imagen está ligada a las negociaciones por el Pacto de Estado de Educación y a continuas visitas -ninguna controvertida- a la Comunidad aragonesa.

Hace apenas unos días, participó en el Foro Europeo de Mujeres Beijing+15 que, durante dos jornadas, reunió a ministras y representantes políticos del más alto nivel de los gobiernos de la Unión Europea, del Parlamento Europeo, Unifem y diversas organizaciones de mujeres. Nadie vierte ninguna crítica sobre ella. Sin embargo, si se decidiera sacarla ya a la palestra se convertiría en blanco de las opiniones y juicios del resto de partidos. De esta forma, se dilata su entrada oficial en la escena pública.

Consejera de Presidencia

Tampoco está claro cómo aterrizará en Aragón. Algunas fuentes del partido señalan la Consejería de Presidencia como su próximo destino laboral, pero no se descarta una vicepresidencia e incluso la portavocía. Estas últimas opciones podrían, no obstante, provocar ciertas susceptibilidades en el socio de gobierno, el PAR, y especialmente en el vicepresidente, José Ángel Biel, que serían perjudiciales para el futuro. Se valora también la posibilidad de que continúe en Madrid y llegue a Aragón cuando ya haya sido proclamada candidata. En este caso, no obstante podría influir una futura remodelación del Ejecutivo de Zapatero. O quizá del propio presidente Iglesias. Aunque algunas fuentes consideran que Iglesias no acometerá ningún cambio de aquí al final de la legislatura para evitar conflictos internos.

De hecho, otras fuentes auguran que será Almunia -si gana las elecciones- la que acometerá la mayor renovación y que serán pocos los consejeros que repitan. En cualquier caso, la idea del partido es que la sucesión sea "rápida". Habrá que ver cómo encajan determinados sectores del PSOE su nombramiento en un comité regional y cómo se equilibran los pesos de las diferentes familias.

Queda por delante todavía más de medio año -si se cumplen las previsiones actuales- para alimentar las elucubraciones y diseñar una sucesión lo menos traumática posible. No obstante, las circunstancias nacionales y las decisiones de Zapatero marcarán este proceso. Algunas fuentes ya han manifestado su malestar con la política del presidente de España y su preocupación por los posibles efectos en los próximos comicios. "No necesita oposición", lamentan.